A cinco meses de que entre en vigor el periodo transitorio del brexit, la Unión Europea y Reino Unido continúan sin llegar a un acuerdo sobre las condiciones definitivas de la salida. Ante la posibilidad de que la ruptura se lleve a cabo sin pacto alguno, el Gobierno de Pedro Sánchez continúa sin hacer públicos el protocolo acordado entre el Ministerio de Exteriores y las autoridades británicas hace un mes en relación a Gibraltar, así como los cuatro memorandos adyacentes.
Sin embargo, una cosa es que no se haga público y otra distinta es que ninguno de los eurodiputados españoles hayan sido informados de las negociaciones. "Gibraltar es una cuestión de Estado, pero Borrell se lo ha negociado solo", reprocha el diputado de la Eurocámara por Ciudadanos Javier Nart tras un encuentro a puerta cerrada celebrado este lunes en el Congreso de los Diputados para el estudio de las consecuencias derivadas de la salida del Reino Unido de la UE.
"Más que la bandera, me preocupa la cartera. "Gibraltar es la tercera economía del mundo por PIB per cápita y multiplica por seis el PIB de sus zonas vecinas y esto no es porque sean una especie de Silicon Valley, sino por los privilegios fiscales de los que gozan", ha señalado. Y lamenta que el Gobierno de España no haya hecho ni siquiera una "declaración filosófica reivindicando su soberanía": "Si negocias sobre algo que es tuyo, de algún modo estás reconociendo que no lo es".
El PP quiere que Borrell explique en la Comisión Mixta de la UE "los detalles del acuerdo que ha alcanzado con el Reino Unido en relación a Gibraltar"
Negociaciones "opacas"
Pero Nart no es el único que afea a Borrell el "secretismo" del acuerdo sobre Gibraltar. Otras fuentes europarlamentarias afirman que se trata del "único capítulo" de las negociaciones del brexit que es "opaco". De forma más explícita, el ex ministro de Exteriores José Manuel García Margallo admitió a Europa Press que hablar de "bajada de pantalones" es una expresión "no muy diplomática" pero "más que ajustada a la realidad" en este caso.
"Aquí ha habido una absoluta rendición y el desaprovechamiento de una ocasión como no habíamos tenido en trescientos años y como probablemente no se nos vuelva a presentar", declaró. Es por ello que el PP quiere que Borrell rinda cuentas en la Comisión Mixta de la Unión Europea para explicar "los detalles del acuerdo que ha alcanzado con el Reino Unido en relación a Gibraltar, así como el plan de contingencia del Gobierno de España ante la posibilidad de un no acuerdo del brexit".
Además, el mismo Margallo aprovechará la próxima sesión de control para pedir explicaciones al Gobierno de Sánchez sobre la negativa a aprovechar para exigir la cosoberanía del Peñón. "Si no lo explican y si todo es tan poco transparente seguramente España sale perdiendo de las negociaciones", consideran fuentes de la Eurocámara.
Por otro lado, fuentes de Podemos avanzan que sí existe un consenso entre los partidos para contemplar un plan de desarrollo en Gibraltar para que los derechos de los trabajadores transfronterizos no se vean perjudicados tras el Brexit "ya sea duro o blando".
De hecho, este es el tema que trata uno de los memorandos de entendimiento según el Gobierno. Otros versan sobre cooperación policial y aduanera; medio ambiente y pesca; otro sobre tabaco y otro sobre fiscalidad que no puede plasmarse en un acuerdo político, por lo que se tendrá que recurrir a un acuerdo internacional.