La Mesa del Parlament sigue adelante en su empeño por dar cobertura legal a la posibilidad de que Carles Puigdemont sea investido por vía telemática. En su reunión de este martes, esta instancia del Legislativo catalán ha dado curso a la iniciativa de JxCat que pretende diseñar un marco legal para que se puedan concretar investiduras y nombrar consejeros a distancia, sino que también otros cargos del Gobierno puedan actuar sin cortapisas desde el extranjero.
El PSC pretendía que esta medida pase al Consejo de Garantías Estatutarias, a fin de que elabore un informe sobre esta pretensión, en tanto que el PP solicitaba que la Mesa revisara su actitud al objeto de que no admitiera a trámite este vía. No se han atendido, como estaba previsto, estas posturas, y los nacionalistas siguen empeñados en sacar adelante una fórmula que, inevitablemente, chocará con la Justicia, ya que tanto el Tribunal Constitucional como el Tribunal Supremo ya han mostrado su rechazo a esta posibilidad.
JxCat considera que Puigdemont podría ser investido vía telemática al haber cambiado su condición procesal. Ahora ya no se encuentra fugado sino bajo los designios de la Justicia alemana, que le ha concedido la libertad provisional a la espera de emitir su dictamen sobre la petición de la euroorden emitida por el juez Llarena.
La Mesa también ha mantenido en vigor la posibilidad de que Puigdemont pueda seguir ejerciendo el voto delegado desde el exterior, como ya hizo en el último pleno del Parlament, al considerar que su situación no ha variado. El portavoz de Ciudadanos, Carlos Carizosa, ha planteado, sin éxito, que el Consejo de Estado se ha manifestado en contra de esta vía.
El pleno de la semana próxima, sin embargo, no se pronunciará aún sobre el voto la reforma de la ley de Presidencia, una propuesta que empuja con firmeza el propio Puigdemont, lo que puede crearle problemas con la Justicia al titular de la Cámara, Roger Torent, en el caso de que salga adelante.
