Pedro Sánchez ha despertado del letargo al que se había sometido y había sometido al PSOE en los últimos seis meses para pasar desapercibido en su apoyo al Gobierno durante la aplicación del 155 en Cataluña, y lo está haciendo con gran ruido político y mediático: Lleva dos semanas protagonizando un road show por televisiones y cadenas de radio, y, a la par, escenificando su distanciamiento de La Moncloa.
Primero dijo que Mariano Rajoy debe convocar elecciones generales si no es capaz de sacar adelante los Presupuestos 2018 en el Parlamento, relató este viernes el ministro de Educación y Portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, luego le exigió que se someta a una moción de confianza, y este martes se levantó el Grupo Socialista de las reuniones de la subcomisión del Congreso para alcanzar un pacto educativo.
Fuentes del Ejecutivo consultadas por Vozpópuli admiten que el PSOE, desdibujado en los últimos sondeos, en los cuales sólo Ciudadanos aparece como claro ganador -en algunos de ellos primera fuerza política, incluso- necesita desmarcarse y tanto en Moncloa como en la sede popular de Génova se le da por "perdido".
Los socialistas tienen claro que no podían seguir tolerando que Rivera y Ciudadanos siguieran apareciendo como la principal oposición a Rajoy cuando son su socio de investidura
En este sentido, los llamamientos este viernes de Méndez de Vigo a Sánchez para que "recapacite" sobre su "espantada" y permita al PSOE volver al pacto son fuegos de artificio destinados a dejar en evidencia la estrategia de los socialistas. "Les pido por el interés de todos los ciudadanos, que recapaciten y vuelvan a hablar. El tema de la financiación se verá al final", ha subrayado el ministro de Educación.
Estos, por su parte, están decididos a situarse frente al PP... pero también frente a Ciudadanos. No ocultan que las demandas del secretario general para que se aprueben los presupuestos y haya elecciones o moción de confianza, son un intento de obligar a Albert Rivera a "retratarse"; porque en estos seis meses de letargo del principal partido de la oposición, dicen el partido naranja, cuarto en las elecciones de junio de 2016 y socio de investidura de Rajoy, ha llegado a postularse como "líder de la oposición".
"Eso es algo que no podíamos seguir tolerando", señala a Vozpópuli un barón socialista. Una cosa es que apoyemos al Gobierno en el 155 por responsabilidad de Estado, y otra que perdamos pie hasta el punto que reflejan algunos sondeos".