Podemos dará su apoyo al decreto de alquileres que ha elaborado el ministerio de Fomento para intentar poner límites a los precios de los alquileres. Miembros de la cúpula de la formación de Pablo Iglesias han explicado a Vozpópuli que, si bien el decreto es “mejorable”, su postura de momento se decanta por dar apoyo a la iniciativa del gobierno de Pedro Sánchez en estos últimos días de mandato.
La posición de Podemos es relevante porque a finales de enero esta se negó a ratificar el decreto durante la votación parlamentaria. Aquello fue el primer gran escollo en el que chocó Sánchez y que se convirtió en el antesala de su caída, tras el tropiezo presupuestario. Ahora, fuentes de Podemos que están negociando con Fomento aseguran que aprobarán el documento.
Aun así, señalan que el borrador que está sobre la mesa no abarca todos los puntos esperados, y consideran que la medida, si bien mejora la situación actual, no resuelve de manera definitiva el problema del coste de los alquileres.
Exigencias de la formación morada
Uno de los puntos del conflicto fue la exigencia de Podemos de fijar un tope a los alquileres. Este control a los precios decae, pero se introducen incentivos que pasan por rebajas en el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) o deducciones en el IRPF para aquellas personas jurídicas que tengan pisos vacíos y los pongan en alquiler.
Además, el borrador incluye un “indicador” para señalar si los arrendatarios suben los precios por encima del incremento del IPC. Y establece que, en caso de desahucio, los juzgados deberán avisar a los servicios sociales. Estas dos medidas son las que Podemos señala como positivas y que hacen decantar la balanza hacia su voto a favor. A lo largo de la mañana de hoy, Fomento ha logrado sumar el apoyo del PDeCAT, pero se desconoce si el PNV aceptará la medida.
El decreto, según mantienen fuentes de Podemos, podría presentarse el próximo viernes en el Consejo de Ministros y ser ratificado la semana que viene en la Diputación Permanente del Congreso, una especie de Parlamento en miniatura (con una representación reducida) en el que Sánchez pretende validar este y otro decreto sociales antes del voto del 28 de abril.