La Dirección Nacional del PP aún confía en que Cristina Cifuentes se salve del caso del máster que cursó en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC). Para ello, la Fiscalía de Móstoles, que prepara una querella en base a las dos denuncias presentadas -una del rector, Javier Ramos, y otra de los alumnos- debería exculparla "antes" de que se celebre la moción de censura en la Asamblea de Madrid.
Si el Ministerio Público no eleva el caso al Tribunal Supremo y la presenta en los juzgados de Móstoles significará que no imputa a la presidenta madrileña y circunscribe los delitos solo a la URJC -al director del máster, Enrique Álvarez Conde, y a quienes hayan participado en la falsificación de las actas-; entonces, a Ciudadanos le será "difícil" argumentar por qué aúpa al socialista Ángel Gabilondo a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, dicen fuentes del PP a Vozpópuli.
Todos los ojos del partido están puestos en la fiscal jefe de Móstoles, Margarita Rossignoli Artega, y, sobre todo en su superior, el fiscal-jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), José Javier Polo; éste, según fuentes judiciales consultadas por Vozpópuli, está en sintonía con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, desde su etapa en Castilla-la Mancha como fiscal-jefe de la Audiencia Provincial de Toledo.
Porque, si el Ministerio Público no acusa a Cifuentes pasarán "meses", pronostican las fuentes consultadas, antes de que el juez de Móstoles al que le toque por reparto acabe la instrucción; y a la formación naranja le será "más difícil todavía" desalojar a Cifuentes a seis meses vista de las elecciones de 2019.
De ahí que el Comité de Dirección de los populares optara este lunes, con Mariano Rajoy presente, por frenar el debate interno entre partidarios y contrarios a dejar caer ya a Cristina Cifuentes; decidió, por contra, poner el foco en Albert Rivera; algo en lo que va a insistir durante las próximas semanas.
El PP va a cargar duramente contra Rivera en estas dos semanas para ganar tiempo hasta que hable la Fiscalía y desviar la atención del debate interno sobre Cifuentes
Exige "expulsar" de Ciudadanos a los diputados Toni Cantó y Miguel Gutíerrez por haber falseado sus currículum; lo mismo al líder socialista, Pedro Sánchez, al cual reclama que impida que el secretario general del PSM, José Manuel Franco, quien también falseó el suyo hace ocho años, se atreva a defender la moción ante el pleno.
Lo dijo el vicesecretario general de los populares Javier Maroto, cuya sola presencia en la rueda de prensa de los lunes, en lugar de los habituales Fernando Martínez Maíllo, coordinador general, o Pablo Casado, portavoz, daba ya idea de que el presidente del Gobierno acababa de ordenar perfil bajo hasta ver qué dice la Fiscalía.
Maroto fue el encargado de anunciar que "aunque no nos gusta la moción de censura", el PP no va a tomar ninguna decisión sobre Cristina Cifuentes hasta que concluyan la investigación interna de la URJC y la judicial; sobre todo esta última.
Rajoy quiere que Rivera se 'retrate' con el PSOE para desgastarle ante el electorado; y, como en Murcia, hará caer in extremis contra Cifuentes si ve que pierde Madrid
Eso le permite ganar tiempo y poner a Ciudadanos en la tesitura de empezar a retratarse con los socialistas para preparar una moción de censura que habrá de debatirse antes del 7 de mayo, cuando concluye el plazo reglamentario. Ayer mismo Inés Arrimadas reconocía ser rehenes de esa nueva estrategia de los populares cuando señaló que "no ha habido ninguna negociación con Gabilondo ni con el PSOE porque estamos a la espera de lo que decida el PP".
Y es que Rajoy quiere obligar a Rivera a hacerse la foto con PSOE y Podemos, en la creencia de que acabará desgastando a su rival entre el electorado de centro-derecha que se disputan.
Al final, como ocurrió en Murcia con el hoy expresidente Pedro Antonio Sánchez, el líder del PP forzará la caída de Cifuentes in extremis solo si ve que el fiscal no despeja la incertidumbre sobre su imputación antes del pleno y aboca a Ciudadanos a investir a Gabilondo; en tal caso, ordenará a Martínez Maíllo negociar con su interlocutor, el secretario general de C's, José Manuel Villegas, un candidato popular a la investidura. Cualquier cosa antes que perder Madrid, la joya de la corona popular.
De momento, la presidenta madrileña ha retomado su agenda institucional suspendida en semanas anteriores. Este lunes asistió con los Reyes y el Gobierno a la bienvenida oficial al presidente de Portugal, de visita de Estado en España; hoy, martes, preside su Consejo de Gobierno semanal y, por la tarde clausurará la II edición del Día de las Profesiones.