Gabriel Rufián intenta cambiar de piel. Después de convertirse en uno de los azotes parlamentarios tanto del PP como del PSOE, protagonistas de polémicas sonadas como entrar en el hemiciclo con esposas o una impresora, Rufián se prepara para tener “perfil más serio, más institucional”, admiten fuentes de ERC. La orden viene de su propio partido y se enmarca en su nuevo papel de portavoz, después de la sustitución de su antecesor Joan Tardá, y en el giro moderado de la formación para tratar de ser la fuerza hegemónica en Cataluña.
La tarea no es fácil. La imagen de Rufián es conocida, y el propio diputado mantienen privadamente, no sin cierto toque irónico, que se considera algo así como un “parlamentario rockero”, reconocen en ERC. Pero la situación procesal en la que se encuentra su líder, Oriol Junqueras, junto a la delicada fase de la investidura de Pedro Sánchez, han empujado al equipo estratégico de ERC a pedirle que se centre.
En sus últimas declaraciones públicas se percibe el cambio. Rufián fue el primer diputado en hablar públicamente de mantener una posición contraria al “bloqueo” de cara a la investidura de Sánchez. Dijo que no habría “cheques en blanco”, pero en ERC insisten en defender una posición constructiva para intentar favorecer un gobierno pactado con Podemos, que consideran la vía más conveniente para sus objetivos políticos. De momento, el partido de Rufián está valorando la abstención en la votación del 23 de julio, aunque también hay dirigentes que esgrimen la posibilidad incluso de un voto a favor.
Giro moderado
Rufián hasta ahora no siempre ha respectado la consigna. Incluso ha habido ciertos encontronazos con algunos miembros de sus equipos por determinadas salidas en las redes sociales. Aun así, el giro moderado del portavoz de ERC en el Congreso se afianza.
Uno de los últimos ejemplos ha sido el tuit en el que Rufián defendió a la cantante Rosalía en contra del Manifiesto Koiné, que pide que el catalán sea la única lengua oficial en Cataluña. “Más canciones de Rosalía y menos manifiestos Koiné”, dijo, lo que encendió el núcleo más duro del independentismo, aquel mismo que anteriormente le aplaudía por sus ataques al Estado u otras instituciones nacionales. Algunos sectores del secesionismo también le reprochan que anteponga el republicanismo nacional al nacionalismo catalán.
Más canciones de Rosalía y menos manifiestos Koiné.
— Gabriel Rufián (@gabrielrufian) July 3, 2019
La nueva consigna de ERC a Rufián tiene como telón de fondo una estrategia política que no se limita al Congreso, sino que abarca también Cataluña. ERC aspira a consolidar su poder territorial, y convertirse en el nuevo partido líder del segmento catalanista, tal y como fue en su día Convergencia. Por ello, la pérdida de la alcaldía de Barcelona, y ahora de la Diputación de Barcelona, no han logrado que la sangre llegue al río.
Elecciones adelantadas
En ERC creen que Quim Torra convocará elecciones anticipadas para aprovechar la sentencia del Tribunal Supremo sobre el 1-O y evitar la vuelta de Artur Mas. Y que esos comicios servirán para alcanzar una victoria histórica y por fin hacerse con el gobierno regional. Rufián, por otro lado, demostró en las últimas elecciones generales tener cierto tirón electoral: ERC fue el partido más votado en Cataluña, con más de un millón de votos.
Como siempre, en política alcanzar el poder significa tener dinero e influencia. En el nuevo escenario político en Cataluña y en Madrid, ERC considera que tiene una oportunidad histórica, y no quiere resbalar ni equivocarse. El nuevo portavoz está avisado.
