Pedro Sánchez busca un nuevo portavoz del Gobierno, según ha sabido Vozpópuli de fuentes de La Moncloa. El jefe del Ejecutivo está preocupado por el desgaste político que ha sufrido María Jesús Montero durante la emergencia sanitaria del coronavirus. Montero es una ministra de la máxima confianza de Sánchez y su favorita para disputar el liderazgo del PSOE andaluz a Susana Díaz e intentar la reconquista electoral de la Junta de Andalucía.
Sánchez quiere mantener a Montero como titular de Hacienda pero protegerla de las ruedas de prensa semanales del Consejo de Ministros; cada vez más centradas en la crisis económica, los recortes y las subidas de impuestos que esperan en el futuro inmediato. La preocupación por Montero ha llegado también al sector crítico con Díaz en Andalucía. Temen que "se queme" demasiado y pierda sus opciones de desbancar a la expresidenta andaluza.
"Está muy abrasada por estos meses", dicen desde del Gobierno. "Sánchez está convencido de que es una excelente ministra de Hacienda, pero que quizá es conveniente retirarle la portavocía para que no siga quemándose".
Crisis de Gobierno en septiembre
Las mismas fuentes explican a este diario que Sánchez y su director de Gabinete, Iván Redondo, buscan un perfil de portavoz más parecido al de Isabel Celaá. Pero todavía no se atreven a poner un nombre encima de la mesa. Algunos dirigentes socialistas de peso sugieren que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, es una buena opción. La figura de Illa ha salido muy reforzada políticamente de esta crisis.
El relevo de Montero en la portavocía es uno de los cambios más significativos de la crisis de Gobierno que Sánchez prepara para septiembre. Todos los Ministerios están alerta ante la remodelación. Y tanto Redondo como los ministros con peso dentro del PSOE, como José Luis Ábalos, llevan semanas aportando ideas y sugiriendo nombres.
Sánchez quiere suprimir algunas carteras de su extenso Ejecutivo formado por 23 ministros. Algunas fuentes indican que el tijeretazo podría ser hasta de seis Ministerios. El presidente del Gobierno es consciente de que es un gesto necesario no solo de cara a la opinión pública, sino también ante sus socios europeos en la negociación del rescate.
Salida de Maroto y Podemos
Una de las ministras que tiene más papeletas para salir del Gobierno es la titular de Industria, Reyes Maroto. La Moncloa está muy descontenta con su gestión durante esta crisis. Maroto ha afrontado los cierres de Nissan y Alcoa, así como los choques del sector turístico y el Gobierno en estos meses de pandemia. La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, es otra de las personas que podría abandonar el Consejo de Ministros, aunque por razones muy diferentes a las de Maroto.
La continuidad de González Laya depende de su candidatura a la dirección de la Organización Mundial del Comercio (OMC). El Gobierno sigue trabajando para convertirla en la única aspirante de la Unión Europea. González Laya deberá formalizar su candidatura, si finalmente lo hace, antes del 8 de julio.
Otra de las dudas es si la crisis de Gobierno afectará a la cuota de Unidas Podemos. El socio de coalición de Sánchez no tiene intención de renunciar o fusionar sus competencias, que son las vicepresidencia de Políticas Sociales y Agenda 2030, Igualdad, Consumo, Empleo y Universidades. Como mucho, reconocen estas fuentes, se podría reunificar Ciencia y Universidades bajo el mando de Manuel Castells. Es una opción que está encima de la mesa si Pedro Duque se marcha finalmente a la Agencia Espacial Europea (ESA), y que tanto Sánchez como Pablo Iglesias ven con buenos ojos.