El Gobierno de Pedro Sánchez sigue jugando a la 'patata caliente' con Muface, la mutualidad que ofrece asistencia sanitaria a los funcionarios civiles del Estado, y pasándose su gestión entre ministerios. Desde la llegada del sanchismo a Moncloa, Muface ha estado gestionada por tres ministerios y cuatro ministros diferentes: Miquel Iceta, Carolina Darias, María Jesús Montero y, ahora, José Luis Escrivá. Una dinámica de la que los sindicatos presentes en el Consejo General de la mutualidad están hartos, como afirman fuentes cercanas a los mismos a Vozpópuli. "Están mareando la mutualidad. No se sabe quién le pone el cascabel al gato".
Escrivá, que estrena cartera digna de Blade Runner -Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública- será ahora el encargado de ponerse a los mandos de Muface, que pasa por un momento crítico para su supervivencia. Esta es, precisamente, una de las razones por las que los entes sindicales no alcanzan a comprender el cambio de cartera.
El 2024 será un año de vida o muerte para la mutualidad, que afronta dos negociaciones decisivas. Por un lado, la modificación del actual concierto sanitario con las aseguradoras (Adeslas, Asisa y DKV), que quedó obsoleto al poco de su aprobación ya que se pactó antes de la Guerra de Ucrania y la consiguiente inflación. Una obsolescencia que ha provocado pérdidas millonarias a las mutuas privadas, algunas de las cuales se plantean incluso abandonar el modelo.
Por otra parte, dicho contrato caduca el año que viene, por lo que también en 2024 tienen que llevarse a cabo las negociaciones pertinentes para alumbrar un nuevo concierto sanitario, claramente infrafinanciado hasta la fecha. Una labor que se antoja complicada si los interlocutores habituales cambian constantemente.
El pasado julio se nombraba a Lidia Sánchez Milán como secretaria de Estado de Función Pública, la máxima representante del Ministerio de Función Pública en las reuniones del Consejo General de Muface. Con la cesión de sus competencias a la cartera de José Luis Escrivá y los consiguientes cambios en la Administración se prevé la llegada de un nuevo secretario de Estado a tal Ministerio.
"Esperamos que no juegue en contra de la mutualidad este cambio de Ministerio. Muface ha ganado 57.000 nuevas personas entre titulares y beneficiarios, está creciendo en volumen de trabajo y afronta un año crítico este 2024", apunta una fuente presente en las reuniones del Consejo General.
Los sindicatos han solicitado una reunión con el ministro Escrivá y le han solicitado una mayor financiación para el mutualismo. "Consideramos que el nuevo ministro tiene una gran responsabilidad en lo que tiene que ver la financiación del mutualismo administrativo. Se le presenta un gran reto, asume el poder dar solución a la problemática de financiación en la que se encuentran los conciertos".
El Gobierno evadió abordar el colapso de Muface en 2023
En la última reunión del Consejo General de Muface de 2023, el Ejecutivo evitó incluir en el orden del día el problema de financiación. Tuvo que ser el sindicato CSIF el que pusiera sobre la mesa el asunto, haciendo hincapié en su preocupación por la situación. La marcha de una aseguradora privada (DKV), podría provocar un efecto en cadena en el que acabasen abandonando el proyecto Asisa o Adeslas. Esto supondría una ruptura del modelo, ya que los funcionarios eligen mayoritariamente la atención sanitaria privada: un 73% frente al 27% que selecciona la Seguridad Social como principal proveedor de atención
"Primero nos pusieron como excusa que el Gobierno no estaba formado, y ahora, que ya ha tomado posesión y se encuentra en pleno funcionamiento, siguen dando largas para no afrontar un tema fundamental", manifestaron entonces los representantes de CSIF.