Vox se ha desmarcado por completo del resto de formaciones políticas en materia climática, niegan la emergencia, pero también se ha apuntado al 'sarao' de la Cumbre del Clima de la ONU (COP25). El evento tendrá lugar en Madrid entre los días 2 y 14 de diciembre.
La formación liderada por Santiago Abascal ha votado en contra de la resolución del Parlamento Europeo para declarar la "emergencia climática" en la Unión Europea y tampoco ha respaldado el decreto ley del Gobierno de Sánchez para considerar la COP25 como acontecimiento "de excepcional interés público" con vistas a aprobar diversas medidas.
ECR, el grupo al que Vox pertenece, considera la llamada "emergencia" como un "invento". Por otro lado, los diputados nacionales no ven con buenos ojos la celebración del evento en la capital, a marchas forzadas, después de que el presidente de Chile, Sebastián Piñera, se viese obligado a suspender el evento debido a las protestas que han sacudido al país andino.
Han solicitado acreditaciones
Sin embargo, según ha sabido Vozpópuli, el partido ha solicitado acreditaciones a la ONU para que varios de sus parlamentarios puedan acudir a la Cumbre del Clima. En concreto, los diputados pretenden asistir al acto inaugural que arrancará este lunes. No ven contradicción.
A última hora de este viernes, y como tantos otros solicitantes, aún no habían recibido la confirmación por parte de la ONU, por lo que su paso por Ifema no es del todo seguro. Fuentes del partido señalan a este diario que no están de acuerdo con la politización de cumbres de estas características porque consideran que la cuestión del clima debe ser objeto de debate científico. Pero defienden su intención de asistir a la COP25 porque, según dicen, para criticar algo, hay que conocerlo.
No deben ser políticos, dicen, los que aborden desde un punto de vista ideológico un asunto que nos parece importante y que es científico. Además, las mismas fuentes aseguran tener interés en conocer lo que se dice en el encuentro, a quién se culpa y demoniza y qué planes tienen organizaciones como la ONU para abordar esta cuestión que no niegan, pero insisten: es científica.
El 'decretazo' de Teresa Ribera
Este miércoles, la Diputación Permanente del Congreso convalidó el real decreto ley de medidas urgentes para la organización en Madrid de la XXV Conferencia de las Partes de la ONU. La norma, aprobada el pasado 8 de noviembre en Consejo de Ministros, contó con los apoyos de PSOE, Partido Popular, Ciudadanos y Unidas Podemos. No con el de Vox.
Entre otros aspectos, esta circunstancia justifica que se pueda beneficiar de los programas específicos de incentivos fiscales al mecenazgo, así como de la tramitación de emergencia prevista en la ley para los contratos públicos necesarios para su preparación y celebración.
Ribera justificó el ofrecimiento de España a acoger la COP25 tras la renuncia de Chile como un "ejercicio de responsabilidad solidaria entre estados comprometidos con el multilateralismo" y porque su cancelación o aplazamiento "habría supuesto una frustración inmensa" para la sociedad.
El representante de Vox, Ignacio Gil Lázaro, basó su 'no' en la "improvisación" de un evento que "conllevará graves riesgos para el interés general y la imagen de España" y porque responde a un "criterio de oportunidad con afán propagandístico" de Sánchez.
Emergencia climática en la UE
Un día después, el Parlamento Europeo aprobó una resolución que declara la "emergencia climática y medioambiental" en la UE con una amplia mayoría y llama a los estados miembros y la Comisión Europea a tomar medidas para combatirla. Con 429 votos a favor, 19 abstenciones y 225 en contra. Entre estos últimos los de los tres eurodiputados de Vox.
El texto pide tomar medidas urgentes necesarias para "luchar y contener la amenaza del cambio climático antes de que sea demasiado tarde".
"Hay un cambio climático. Pero no emergencia climática ni amenaza de catástrofe total, sino un miedo artificial para una colosal operación ideológica de control social y político", denuncia el eurodiputado de Vox Hermann Tertsch en sus redes sociales.
"En vísperas de la fantasmal cumbre COPP25 de la fantasmal Conferencia de Cambio Climático, un fantasmal Parlamento Europeo declara una fantasmal emergencia climática. Nadie se engañe, es una cínica apelación a la irracionalidad y el miedo al servicio de la ingeniería social", critica.
La posición de Abascal
El líder del partido, Santiago Abascal, se pronunció sobre el clima en la misma línea, aunque más moderado, durante su aparición en El Hormiguero. El político vasco cree que "cambio climático ha habido siempre". "El clima está cambiando y hay un consenso amplio en que se debe a la acción del hombre y hay quienes piensan que el hombre no tiene capacidad para revertir esa situación", apuntó.
"Yo no soy científico, soy político. No estoy en las posiciones apocalípticas. Cuando hay un acuerdo entre multinacionales, los poderes y la extrema izquierda, desconfío", añadió para culpar del plástico en los mares al sudeste asiático, pero también a quienes consumen los productos que allí se fabrican gracias a la explotación de los trabajadores.
"Con la excusa del cambio climático, nos restan libertad, nos dicen que no andemos con coche, que tengamos menos hijos porque hay superpoblación... Se habla mucho de una emergencia climática pero en España también hay una emergencia social y nacional", zanjó.