El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero se encuentra en Venezuela, adonde llegó este viernes en el vuelo de Iberia IB6673 Madrid-Caracas, cuando se cumplen tres semanas de la polémica escala en España de la vicepresidenta de aquel país, Delcy Rodríguez, cuya deportación evitó el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, según informan a Vozpópuli fuentes diplomáticas.
Zapatero, quien ha viajado ya en 38 ocasiones al país iberoamericano, es firme defensor de un cambio de postura de la Unión Europea y de España que incluya acabar con las sanciones a los jerarcas del régimen encabezado por Nicolás Maduro -incluida la prohibición de vuelos a Europa y congelación de todas sus cuentas en el exterior- para "no demonizarle" y facilitar un acuerdo entre Gobierno y oposición para dar paso a la convocatoria de unas elecciones libres.
A diferencia de Felipe González, que considera a Maduro un "tirano" con el cual nada hay que negociar, en la línea de la oposición venezolana, el PP, Ciudadanos Estados Unidos y buena parte de las cancillerías del norte europeo, el último exjefe de gobierno socialista aplaude la decisión de Pedro Sánchez de no recibir en La Moncloa el pasado 25 de enero, cinco días después del incidente con la Policía en Barajas desvelado por este periódico.
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, tiene prevista hoy una conferencia con la ministra de Exteriores en la que, previsiblemente, le expondrá su malestar por el cambio de postura de España hacia Guaidó
Guaidó fue recibido finalmente por la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, después de verse con Pablo Casado, Vox y ser recibido con todos los honores en el Ayuntamiento de Madrid y en la sede de la Comunidad, antes de participar con toda la oposición a Maduro en una concentración ante la Puerta del Sol para pedir democracia en Venezuela.
El cambio de estrategia de Sánchez, que tiene que ver con el hecho de que el Gobierno de ahora es de coalición con Unidas-Podemos, una formación de izquierda muy contraria a Guaidó, ha molestado sobremanera a EEUU cuyo secretario de Estado, Mike Pompeo, va a mantener este viernes una conferencia telefónica con González Laya pare pedirle explicaciones por el cambio de actitud de España respecto al denominado 'presidente encargado' de Venezuela, al que apoyan 60 países.
Es significativo que tras esa charla, el embajador estadounidense encargado para los asuntos de Venezuela, el halcón republicano Elliot Abrahms, va a ofrecer una rueda de prensa por videoconferencia con periodistas españoles, previsiblemente para explicar ese malestar.
PP: evitar el borrado de los vídeos
Y en el Congreso de los Diputados la oposición parlamentaria de PP, Vox y Ciudadanos no ceja en su empeño de que el ministro Ábalos dé explicaciones sobre por qué impidió en la madrugada del lunes 21 de enero la deportación de Delcy Rodríguez en el primer avión a Caracas, en lugar de permitir que pasara la noche en la terminal VIP del aeropuerto y a las 8.20 de la mañana siguiente embarcara en el vuelo QR184 rumbo a Doha (Qatar).
Los populares están intentando por todos los medios evitar que, en virtud de la Ley de protección de Datos, el 20 de febrero -cuando se cumpla un mes del incidente- el Ministerio del Interior borre los vídeos de las cámaras de seguridad, que demostrarían que la vicepresidenta venezolana llegó a deambular libremente por la T4 a la espera de tomar el vuelo a Doha; llegando incluso a comprar en alguna tienda, pese a tener prohibida su entrada en España.