Francisco Nicolás Gómez Iglesias, conocido como el pequeño Nicolás, ha dicho a través de su cuenta de Twitter que "en ningún caso" dejó una cuenta pendiente sin pagar en un restaurante, hecho por el que la noche del jueves fue detenido. "En ningún caso dejé una cuenta pendiente en el citado restaurante, puesto que la cena a la que asistí, que no es la que se ha publicado, fue abonada por mí, tal y como se podrá comprobar en la caja de dicho restaurante", expresa en su cuenta oficial de esta red social.
El director de noche del restaurante Ramsés, Luis López, ha dicho este viernes a Efe que el pequeño Nicolás dijo que bajaba un momento a otra planta del establecimiento, ubicado en la plaza de la Independencia de la capital, y aprovechó para irse sin abonar la cuenta, de un importe de 530 euros. En este sentido, Francisco Nicolás explica que "una vez terminada la cena" llegaron algunos conocidos con sus amigos.
"Cuando acabaron de cenar -prosigue- me hicieron llegar una cuenta que no me correspondía, ya que la mía estaba pagada. Hablé con el director del local y le pedí que comprobase a través de su personal, o revisando la caja o cámaras de seguridad, que mi cuenta había sido abonada y ésta no me correspondía". Posteriormente, continúa explicando, y tras "rogar" al restaurante que hablara con los "responsables" de la cena que se le reclamaba, "decidió" irse al lugar donde estaban sus conocidos y así aclarar la situación.
"Al llegar a la otra sala (del restaurante), y cuando llevaba pocos minutos en su interior hablando con ellos, me informaron que la policía se encontraba fuera. Abandoné el local y me encontré con 10 agentes y cinco coches de policía que me dijeron que tenía que ir a comisaría como único detenido, a pesar de que allí se encontraba el resto de comensales", relata.
Tras estos hechos, continúa narrando, "el anfitrión de la citada cena" acudió a pagar la "parte que se suponía que estaba pendiente". Por todo eso, y ante el "perjuicio" que la supone esta situación de "indefensión y linchamiento mediático", Francisco Nicolás reclama que este "desafortunado incidente quede completamente aclarado".
La dueña del restaurante ha formalizado la denuncia, pero ha desistido de emprender acciones legales porque, según ha manifestado, los amigos del pequeño Nicolás han contactado con ella y se han comprometido a hacerse cargo de la cuenta.
El pequeño Nicolás está imputado por otros supuestos delitos por los que ya fue arrestado con anterioridad, entre ellos por uno contra las altas instituciones del Estado al haberse atribuido el haber trabajado para el Centro Nacional de Inteligencia.
COMUNICADO: Ante las informaciones publicadas me veo en la necesidad de hacer las siguientes aclaraciones. pic.twitter.com/ym9qWOVXlv
— Francisco N. (@FranNicolas_G) February 13, 2015
Comunicado íntegro difundido en Twitter:
Ante las informaciones aparecidas en las últimas horas, me veo en la necesidad de hacer las siguientes aclaraciones:
En ningún caso dejé una cuenta pendiente en el citado restaurante, puesto que la cena a la que asistí, que no es la que se ha publicado, fue abonada por mí, tal y como se podrá comprobar en la caja de dicho restaurante.
Una vez terminada mi cena, llegaron por su parte algunos conocidos con sus amigos. Cuando acabaron de cenar, me hicieron llegar una cuenta que no me correspondía, ya que la mía estaba pagada. Hablé con el director del local y le pedí que comprobase a través de su personal o revisando la caja o cámaras de seguridad que mi cuenta había sido abonada y ésta no me correspondía.
Posteriormente, y tras rogarle en repetidas ocasiones que hablaran con los encargados de pagar dicha cena, decidí irme al lugar donde se encontraban mis conocidos para aclarar la situación.
Al llegar a la otra sala, y cuando llevaba pocos minutos en su interior hablando con ellos, me informaron de que la policía se encontraba fuera. Abandoné el local y me encontré con 10 agentes y 5 coches de policía que me dijeron que tenía que ir a comisaría como único detenido, a pesar de que allí se encontraban el resto de comensales. En ningún momento los agentes hablaron con ninguno de ellos para aclarar la situación.
Una vez en comisaría, y tras varias horas detenido, el anfitrión de la citada cena acudió a saldar la parte que se suponía que estaba pendiente.
Por todo esto y ante el perjucio que me supone esta situación de indefensión y linchamiento mediático al que me he visto sometido durante todo el día, me gustaría que este desafortunado incidente quedase completamente aclarado.