Las restricciones desde marzo por la pandemia de COVID-19 han provocado un descenso del 20,2% de las infracciones penales en los nueve primeros meses de 2020, con una caída en todos los indicadores de criminalidad excepto en las tentativas de homicidio doloso y asesinato consumado, que sufren un aumento del 15,6% al registrarse 98 casos más que en el mismo periodo de 2019.
Según el Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior correspondiente al tercer trimestre de 2020, hasta septiembre se han contabilizado 1,3 millones de hechos, un 20,2% menos que hace un año. "Buena parte de dicho descenso", según este departamento, "está íntimamente correlacionado con las circunstancias derivadas de la entrada en vigor del real decreto del estado de alarma de 14 de marzo por la crisis del COVID-19, y que estuvo vigente hasta el 21 de junio".
El descenso alcanza a todos los tipos penales excepto tentativas de homicidios dolosos y asesinato consumado, con 725 casos frente a los 627 de hace un año. De esta forma, los homicidios dolosos y asesinatos consumados bajan un 6,8% (232, frente a 249); así como los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria (-17,3%); secuestros (-14,1%) o delitos contra la indemnidad sexual (-12,2%).
También bajan las indicaciones en los robos: con violencia o intimidación (-27,1%); robos con fuerza (26,2%) y en domicilios (26,8%); los hurtos (-41,4%); las sustracciones de vehículos (-25,9%). Los delitos relacionados con tráfico de drogas también descienden, aunque de forma leve al marcar un 0,2% menos.
En el balance se añaden los datos de Policía Nacional y Guardia Civil, así como Ertzaintza, Mossos d'Esquadra y Policía Foral de Navarra, así como de cuerpos de Policía Local, ya que se vuelca la información de 250 localidades con una población superior a 30.000 habitantes.