El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este sábado su plan fiscal para aliviar la inflación poniendo en valor los "impuestos progresivos", atacando a los "poderosos" y justificando que sean los "más pudientes" los que "arrimen el hombro para sacar adelante el país".
Así lo ha manifestado el presidente durante la clausura de la IV Edición del Foro de La Toja, que se celebra en Eurostars Gran Hotel La Toja (Pontevedra). El líder del Ejecutivo ha intervenido de forma telemática desde el Palacio de La Moncloa debido al positivo en coronavirus que arrastra desde el pasado domingo y que le han causado "un poco de gripe".
Después de dedicar los minutos iniciales para condenar la "anexión ilegal" por parte de Rusia de las regiones ocupadas, Sánchez ha centrado casi la totalidad de su intervención en justificar el último plan fiscal lanzado por el Ejecutivo, que consiste en bonificar el IRPF a las rentas de hasta 21.000 euros, una medida que se complementará con un nuevo impuesto para fortunas de más de tres millones de euros y ajustes en sociedades e IVA.
Sánchez ha presumido de que su Ejecutivo ha movilizado unos 35.000 millones de euros, lo que supone un 2,9% del Producto Interior Bruto (PIB) español, para tratar de mitigar el impacto de la subida de precios.
"Soy plenamente consciente del enorme impacto de la subida de los precios sobre la economía real, especialmente en la de la clase media y trabajadora, la mayoría social", ha afirmado. A juicio del presidente, la "mayor muestra de compromiso" para quienes velan por nuestra seguridad y servicios sociales es "garantizar la financiación adecuada de los servicios públicos a través de una fiscalidad justa".
Por ello, Sánchez ha defendido que "cualquier alivio fiscal" debe centrarse en la "mayoría social" y "no en beneficiar a unos pocos" que, según ha señalado, "siempre son los mismos: los poderosos y minoritarios". "En las circunstancias actuales es necesario pedir un esfuerzo de solidaridad a los que más tienen", ha agregado.
"Quienes más tienen, deben aportar más a la caja común", ha insistido el presidente, que ha criticado al los "brujos que rescatan sus fracasadas recetas y proclaman que el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos".
Sánchez ha dicho que había otras propuestas que estudiaron con atención como las de una deflactación lineal y sin progresividad propuesta por el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y que ya se aplica en alguna comunidad gobernada por los populares. Según ha argumentado el socialista, con esta propuesta, el ahorro para un trabajador sin descendientes que gana 18.000 euros es de 23 euros, mientras que con la reforma del Gobierno es de 746. "Esa es la diferencia, y lo demás es confusión y una gigantesca cortina de humo", ha aseverado.
Respecto al impuesto para grandes fortunas, el dirigente socialista ha afirmado que el coste de la actual crisis "no puede recaer en exclusiva en la clase media trabajadora como en la crisis financiera" de hace una década. "Esta vez, los más ricos pudientes tienen que arrimar el hombro para sacar adelante el país".
Tony010
Viva Venezuela!!!
Loquehayqueveryoir
El día que ha los ricos o pudientes, como los llamáis, se cansen de pagar vuestra fiesta sin tomarse una copa, quien pagará la fiesta en la que cierta clase política vive continuamente?