El famoso 'semáforo covid' fue aprobado en octubre de 2020 con el objetivo de servir como faro y guía a las comunidades autónomas en la gestión de la pandemia. Su aplicación, sin embargo, fue siempre algo opcional. La pasada semana, el Ministerio de Sanidad, con el apoyo de 11 comunidades autónomas, imponía su obligado cumplimiento en las restricciones dirigidas a la hostelería y el ocio nocturno. Esta decisión ha sido inhabilitada cautelarmente por la Audiencia Nacional tras recurso de la Comunidad de Madrid.
Este semáforo sitúa a dos comunidades en nivel de alerta 3, siete en nivel de alerta 2 y otras siete en nivel de alerta 1. Sin embargo, la metodología que utiliza para determinar el nivel de alerta de cada comunidad lleva en algunas ocasiones a callejones sin salida. Vozpópuli ha revisado los indicadores de todas las comunidades autónomas y hay cinco con un nivel de alerta que no les correspondería, si nos atenemos a lo que dice el documento de 'Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de covid-19': Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y León y Cataluña.
Metodología del 'semáforo covid'
Lo primero que hay que conocer es qué metodología sigue el 'semáforo covid' a la hora de establecer en qué nivel de alerta se encuentra una comunidad autónoma. El semáforo establece seis indicadores para medir la situación epidemiológica (Bloque 1) y 2 para evaluar la capacidad asistencial (Bloque 2). En el bloque 1 se encuentran los siguientes indicadores:
- Incidencia acumulada en casos diagnosticados los últimos 14 días
- Incidencia acumulada en casos diagnosticados los últimos 7 días
- Incidencia acumulada de casos con 65 o más años diagnosticados en 14 días
- Incidencia acumulada de casos con 65 o más años diagnosticados en 7 días
- Positividad global de las pruebas de infección por semana
- Porcentaje de casos con trazabilidad
Del bloque 2 forman parte:
- Ocupación de camas de hospitalización por casos covid
- Ocupación de camas UCI por casos covid
Que un territorio se encuentre en nivel de alerta 1, 2, 3 o 4 dependerá de cuantos indicadores están en riesgo bajo, medio, alto o muy alto. Así, se establece que:
- Nivel de alerta 1: Cuando al menos dos indicadores del bloque I y uno del bloque II están en nivel bajo.
- Nivel de alerta 2: Cuando al menos dos indicadores del bloque I y uno del bloque II están en nivel medio.
- Nivel de alerta 3: Cuando al menos dos indicadores del bloque I y uno del bloque II están en nivel alto.
- Nivel de alerta 4: Cuando al menos dos indicadores del bloque I y uno del bloque II están en nivel muy alto.
Además, se señala que cuando hay un empate entre indicadores, es decir, que hay el mismo número en dos niveles de alerta distintos, debe prevalecer el de mayor riesgo. Según esta metodología, hay cinco comunidades autónomas con un nivel de alerta que no les corresponde.
Aragón
Aragón está en un nivel de alerta 2, según el último informe del Ministerio de Sanidad. Pero vemos que esto no se cumple según los indicadores. Debería tener o bien la ocupación de camas hospitalarias o la de UCI en riesgo medio para estar en este nivel de alerta. En cambio, su ocupación de camas está en riesgo bajo (4,2% de ocupación) y la de UCI en riesgo muy alto (20,9%). Esta región tiene dos indicadores epidemiológicos en riesgo bajo (Incidencia a 14 días en mayores de 65 e incidencia a 7 días en esta misma población), lo que unido al indicador de camas la deberían situar en nivel de alerta 1 y no 2.
Asturias
Al igual que Aragón, Asturias está en nivel de alerta 2. Sin embargo, debería encontrarse en nivel de alerta 1 ya que ninguno de sus indicadores de capacidad asistencial está en riesgo medio. Tanto la ocupación de camas (2,1%) hospitalarias, como de camas UCI (6,9%) se encuentran en riesgo bajo, lo que unido a que la incidencia en mayores de 65 también está en riesgo bajo deberían situarla en nivel de alerta 1.
Castilla-La Mancha
Tampoco se justifica que Castilla-La Mancha esté en nivel de alerta 2. La ocupación de camas hospitalarias la sitúa en riesgo bajo, y la de UCI en riesgo alto. Dado que su incidencia a 7 días para mayores de 65, trazabilidad y positividad de PCR la sitúan en riesgo bajo, debería está en nivel de alerta 1, pues hay más indicadores en nivel bajo que en nivel medio.
Castilla y León
Otro tanto pasa con Castilla y León, comunidad que Sanidad sitúa en nivel de alerta 2. Lo cierto, según el semáforo, es que debería estar en nivel de alerta 1. Su incidencia en mayores de 65 años (a 14 y 7 días), positividad de PCR y ocupación de camas hospitalarias están en riesgo bajo. Esta mayoría debería hacer que Castilla y León estuviera en nivel de alerta 1.
Cataluña
Similar situación a Castilla-La Mancha y Castilla y León. Su ocupación de camas, positividad e incidencia en mayores de 65 (a 14 y 7 días) están en riesgo bajo. Debería estar en nivel de alerta 1, pero el Ministerio la pone en nivel de alerta 2.
Consecuencias
Gracias a la paralización del acuerdo del Interterritorial publicado en el Boletín Oficial del Estado por parte de la Audiencia Nacional tras el recurso de la Comunidad de Madrid, estos niveles de alerta no tendrán consecuencia para las comunidades autónomas. De no haber sido así, estas regiones habrían tenido que imponer restricciones a la hostelería como la limitación a un tercio de su capacidad interior y a un 75% el aforo en terraza a pesar de que deberían estar en un nivel de alerta inferior.