El Senado ha reprobado a Raquel Sánchez, ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, por su gestión de los servicios ferroviarios de Cercanías. La reprobación se ha producido gracias a la unión de grupos parlamentarios totalmente dispares, como ERC y PP, de la mano de PNV, Junts, Compromís y otros grupos nacionalistas.
La iniciativa ha partido de ERC, que ha planteado una moción para reprobar a la titular de Transportes "por la constante ineficacia en la gestión de RENFE y ADIF en Catalunya, la incapacidad para adoptar medidas para hacer frente a las incidencias y la afectación diaria en la calidad del servicio y la movilidad de las personas viajeras". A esta moción acompañaba en origen la exigencia al Gobierno para "realizar el traspaso integral de Rodalies, traspasar los recursos económicos pertinentes y transferir la titularidad de la infraestructura ferroviaria, así como el material móvil, personal y las estaciones en condiciones de uso a la Generalitat de Catalunya".
Y también que, "con carácter inmediato", se ejecutasen "las partidas presupuestarias del servicio de Rodalies en Catalunya pendientes de ejecución". Finalmente, los grupos que han apoyado la reprobación han suscrito un texto conjunto que incluye, como proponía el PP en una enmienda, la referencia a "Cataluña y otras Comunidades Autónomas" y en cambio no recoge la referencia al traspaso de Rodalies a la Generalitat, en el que ERC, como ha indicado la senadora Mirella Cortés, seguirá trabajando en todo caso.
Dardos al PP y al PSOE por sus gestiones
Cortés ha afirmado que "es escandalosa la realidad actual de Rodalies y la gestión de la ministra Raquel Sánchez", aunque ha culpado tanto a los gobiernos del PSOE como a los del PP, que desde 2015, ha dicho, han dejado de invertir en las cercanías catalanas "más de 12.000 millones de euros".
El PSOE, al que los republicanos no han aceptado una enmienda que dejaba la iniciativa en una petición al Gobierno para "avanzar en el cumplimiento de los compromisos presupuestarios alcanzados con la Generalitat de Cataluña" y "seguir desarrollando la ejecución del Plan de Rodalíes", ha echado en cara a Esquerra que haya pactado con el partido que "utilizó ir en contra de Cataluña para sus intereses".
El socialista Antonio Poveda ha acusado a ERC de actuar "en plan oportunista" y se ha mostrado "sorprendido por la aceptación de la enmienda del Partido Popular", que ha explicado porque a ambos "les preocupa que el PSOE gana las elecciones en España y el PSC en Cataluña".
El representante del PP, Francisco Martín Bernabé, ha calificado la gestión de Raquel Sánchez como "Pepe Gotera y Otilia, chapuzas a domicilio" y Josep Lluis Cleries, de Junts, se ha mostrado "encantado de la vida de que ahora Esquerra se suba en el tren de ir todos juntos por Cataluña". A su vez, Isabel Vaquero, del PNV, y Carles Mulet, de Compromís, han aprovechado para poner el foco también en la situación "gravísima" y de "maltrato colonial", respectivamente, de las cercanías en sus comunidades y reclamar igualmente su traspaso.