La Universidad Complutense de Madrid devolverá el anticipo que ha pedido a la Comunidad de Madrid de ocho millones de euros el próximo septiembre cuando comience a entrar en caja el dinero de las matrículas de los alumnos, según han informado fuentes del centro. Esta no es la primera vez que la universidad solicita un anticipo, pues se acogió al Plan de Proveedores.
El Consejo de Gobierno regional otorgó el jueves un adelanto de ocho millones que será utilizado para pagar las nóminas y la paga extra de junio. Esta situación se produce “tras una tensión de tesorería” en las cuentas del centro, según señalaron en la Complutense.
La situación actual proviene de la deuda del equipo anterior que dejó un ”agujero” de 150 millones de euros. Tras el superávit del año 2012 y el pago de algunas deudas, la cifra quedó en 127 millones de euros.
El año pasado el Gobierno regional incluyó en el Plan de Proveedores a la Complutense y le anticipó 58 millones de euros. Esta cantidad se pagará en 10 años con dos de carencia. El coste anual para pagar este préstamo será de 9 millones al año. La cifra quedó reducida a unos 70 millones.
Pero además, el Gobierno regional perdió una sentencia que le supondrá al centro poder dedicar otros 39 millones de euros a pagar esta deuda. Carrillo informó que quedará reducida de esta manera a 30 millones de euros.
El rector Carrillo se ha quejado de que a esta situación se ha llegado a pesar de los cerca de 70 millones de euros de los recortes de la Comunidad de Madrid en los años 2012 y 2013, a los que se suman otros cerca de 20 millones en el año 2014.
Carrillo mantiene que esta reducción de ingresos no se produce por la situación económica, sino “de una opción política en la que la crisis económica deja de ser la causa para ser simplemente la excusa”.
