Poco a poco se va resolviendo el misterio del velero 'fantasma' que este jueves apareció varado en la playa Area Maior, en la localidad coruñesa de Muros, sin ningún tripulante a bordo. La historia tiene su jugo, porque todo indica que la embarcación surcó en solitario el Atlántico hasta alcanzar la costa de Galicia tras varias semanas de navegación a la deriva. Los especialistas creen que fue arrastrada hasta el litoral por los fuertes vientos que han barrido la comunidad gallega desde finales del pasado mes.
Miembros del servicio de emergencia de Muros han confirmado que la embarcación es un catamarán Lagoon 42, su nombre es Lucky Cat y su propietario, que ya ha sido avisado del hallazgo, es de nacionalidad eslovaca. En sus redes sociales señalan igualmente que posiblemente el único tripulante del barco fue rescatado por vía aérea en medio de un fuerte temporal en aguas de Estados Unidos, quedando la embarcación a la deriva. Allí empezó un largo viaje sin control que acaba de concluir en los magníficos arenales del municipio de Muros.
Documentación a bordo
En el interior del barco fue hallada diversa documentación que posibilitó contactar con facilidad con su dueño. Los agentes del citado servicio de emergencias señalan que “los ingenieros opinan que los catamaranes, de doble casco, no son tan seguros como los monocasco en mares complicados". En este caso, queda claro que sí.