Vox rechazó verse con Marlaska para hablar del Plan Antiterrorista por invitar a EH Bildu

El Grupo Parlamentario Vox rechazó acudir a la reunión convocada por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para hablar del Pacto Antiterrorista porque los representantes de EH Bildu también estaban invitados al encuentro. Según fuentes del partido liderado por Santiago Abascal, el departamento del Interior habría enviado una carta para que miembros de todos los grupos parlamentarios fuesen a su sede este lunes, pero en su caso declinaron la oferta y acusan a Marlaska de utilizar la "reunión" para "tapar el escándalo de los contactos con el entorno de ETA".

En Vox esgrimen que no suelen acudir a convocatorias fuera del Congreso de los Diputados porque es en ese espacio donde, a su juicio, los miembros del Ejecutivo deben dar cuenta de su gestión. "Con luz y taquígrafos", apostillan. Los de Santiago Abascal no entienden que EH Bildu esté llamado a participar en un encuentro para hablar de la prevención, protección y respuesta antiterrorista del país. Además, Vox reprocha al titular de Interior no haber dado las suficientes explicaciones sobre el informe de la Guardia Civil que ha revelado los contactos entre emisarios de ETA e Interior para favorecer a los terroristas presos.

Desde el Gobierno no han ocultado que todos los grupos políticos estuviesen invitados al encuentro, incluido EH Bildu. Por otro lado, el anterior Plan Antiterrorista tenía siete años de antigüedad y el departamento liderado por Grande-Marlaska llevaba tiempo trabajando en la nueva estrategia, que incorpora las directrices de la Estrategia contra el Terrorismo de la Unión Europea, revisada en 2017, de la Estrategia Nacional contra el Terrorismo de 2019 y de la Estrategia de Seguridad Nacional aprobada en 2021 en relación al fenómeno de la radicalización de tipo yihadista.

Ausencias de Vox, ERC y Bildu

Preguntado por las ausencias de Vox, Bildu y ERC, Marlaska se limitó a apelar a la unidad política y social y a la implicación de todas las administraciones para hacer frente al terrorismo. Según el ministro del Interior, esa "unidad" es una de las claves que llevó a la derrota de ETA. Fuentes se su departamento sostienen que, desde un principio, se tuvo claro que una vez elaborado el plan lo primero era presentárselo a los grupos parlamentarios. De esta forma, apuntan, tendrían conocimiento de primera mano y podrían plantear las cuestiones que considerasen pertinentes. Además del ministro, en la cita estaban presentes responsables antiterroristas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. "Se trata de mantener ese espíritu de unidad", insisten desde Interior.

En las filas de Vox sostienen que su ausencia en esa y otras reuniones del Gobierno se debe, precisamente, al vergonzoso e inaceptable pacto del Ejecutivo con los herederos de ETA. "Los ha decidido colocar en la dirección del Estado. Como les hemos dicho en reiteradas ocasiones, sólo escucharemos al Gobierno y a sus socios herederos de ETA en la tribuna del Congreso, donde seguiremos pidiendo su dimisión", reiteran.

Fuentes del entorno de Marlaska replican que no les han sorprendido algunas ausencias, que eran previsibles, pero sí que Vox en esta materia alinee su estrategia con Bildu, y decida quedar fuera de la unidad política frente al terrorismo y no quiera conocer de primera mano en el nuevo plan antiterrorista.

El nuevo Plan Antiterrorista

Tras su reunión del lunes, el ministro del interior explicó que el nuevo Plan Antiterrorista mantiene los cinco actuales niveles de riesgo (nivel 1 para el riesgo bajo y nivel 5 para el riesgo muy alto, por la inminencia de un ataque terrorista o la comisión efectiva del mismo), pero articula una nueva respuesta operativa coordinada, integral y proporcionada a los riesgos derivados de la amenaza terrorista mediante el refuerzo de la coordinación policial y con otros centros sectoriales y entidades con competencias en seguridad. 

El Plan prevé que, en los supuestos de atentado terrorista en España, o en el extranjero si son contra personas o intereses nacionales, se reúnan de inmediato la Mesa de Coordinación y la Mesa de Evaluación de la Amenaza. La principal novedad es que esta Mesa de Coordinación tendrá un carácter reforzado para poder coordinar la ejecución y el desarrollo de los planes de respuesta sectorial antiterrorista; movilizar los recursos de cada cuerpo policial o institución participante en el plan y activar los servicios de asistencia a las posibles víctimas e identificación de las personas afectadas.

La Mesa de Coordinación reforzada estará integrada por la Secretaría de Estado de Seguridad y su Dirección General de Coordinación y Estudios; representantes de Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d'Esquadra, Ertzaintza y del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado. Además, también estarán miembros del Centro Nacional de Protección de Infraestructuras Críticas y de la Oficina de Coordinación de Ciberseguridad; la Dirección General de Protección Civil y Emergencias; la Dirección General de Relaciones Internacionales y Extranjería; la Dirección General de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo y las unidades o servicios de coordinación de crisis de los que dependan infraestructuras de transporte o de otra naturaleza cuando se considere conveniente.

Traslado de presos de ETA

Tal y como publicó este martes Vozpópuli, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, y el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco continúan acordando el traslado de presos de ETA a cárceles del País Vasco. Y ha dado luz verde al traslado de seis presos y un séptimo etarra a un centro penitenciario de Navarra. Las decisiones se conocen tras la reciente polémica del citado informe de la Benemérita.

La semana pasada, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, instó al PP y a Vox a no difundir "bulos" sobre supuestos tratos de favor penitenciarios a etarras y ha retó a ambos partidos a encontrar en el informe de la Guardia Civil que recogía conversaciones con el entorno de los presos de la banda dónde se dice que se ha incumplido la ley. "Hablan de conversaciones soterradas y clandestinas. No vengan con bulos, en qué párrafo, en qué página de ese informe se hace referencia a que no se cumple la ley", espetó.

El polémico documento incluye conversaciones entre abogados de los presos o de la red ciudadana Sare, como el exconsejero vasco Joseba Azkarraga, con alusiones a gestiones ante el secretario general de Prisiones, Ángel Luis Ortiz, tras analizar el teléfono de Antonio López Ruiz 'Kubati, exjefe de ETA y actual dirigente de Sortu.