"En calidad de presidente del Congreso le ruego que haga llegar al Grupo Parlamentario Socialista, pero también al resto de los grupos representados en la Cámara, mi sincera petición de perdón por mi inapropiada expresión proferida durante el pleno del pasado 11 de julio". La diputada del PP Andrea Fabra encabeza así una misiva que ha hecho llegar a Jesús Posada en un intento por poner punto y final a la polémica que suscitó el pasado miércoles tras proferir un "que se jodan" justo poco después de que Mariano Rajoy anunciara el recorte en la prestación por desempleo.
La cuestión ha llegado hoy a la Junta de Portavoces de la mano del PSOE y de IU que querían que se actuara disciplinariamente contra ella. A cambio, Fabra se ha visto obligada por su partido a escribir un texto de disculpa en la que afirma reconocer que en dicha sesión "cometí un error del que no me siento honada y por el que recurro a la benevolencia de la Cámara rogándole que estime mis disculpas". Asegura asimismo que no ha pretendido "dañar en su dignidad, imagen y prestigio" al Congreso de los Diputados, justo cuando "las circunstancias difíciles" del país exigen a los representantes de los ciudadanos "un comportamiento irreprochable".
En un último párrafo, asegura sentir el máximo respeto "por quienes tienen posiciones distintas a las mías", en alusión a los diputados de la bancada socialista a los que dijo haber soltado el "que se jodan" y no a los parados, y asume "la altura de miras que debe presidir nuestra actuación, honrando el contrato de representación suscirto con los ciuadanos", para lo que, dice, no escatimará esfuerzos en el resto de la legislatura.
El presidente del Congreso ha arrancado la sesión de pleno de esta tarde anunciando a los diputados que se ha reunido con Fabra por la mañana y la había amonestado verbalmente.
