El porno es el contenido estrella de Internet, normalmente fuera de los canales mensurables. Los datos y audiencias son imposible de cotejar porque está por todas partes. Solo un detalle. Una de las páginas porno más consumidas de la red sirve sus cifras anuales. Necesitarías 68 años seguidos sin parar para ver todos los vídeos que se subieron a PornHub solo en 2017. Y eso en una sola web.
Pero la mayoría del contenido adulto escapa al tráfico y escrutinio de las plataformas convencionales. El consumo privado cambia los canales clásicos de medición y las cifras de visionado son una incógnita. Lo que está claro es que el modo más consumido de porno ya es el vídeo y eso cuesta mucho dinero de producción y de servidores.Muchos usuarios o empresas que empiezan en el negocio utilizan las plataformas convencionales para ahorrar costes. El procedimiento es sencillo. Abrirse una cuenta de youtube, subir material en modo privado y embeberlo en sus web de acceso limitado. Como estas web suelen ser privadas y es muy difícil que alguien denuncie el contenido al que se llega con voluntad de hacerlo, los vídeos no son reportados. Los bots automáticos de Youtube encargados de filtrar la carne y los pezones de 300 horas de vídeo que se sube cada minuto a la plataforma son todavía menos eficientes que el reporte de los usuarios. Así de sencillo.Según la propia compañía han eliminado 8 millones de vídeos entre octubre y diciembre de 2017. De estos, 6,7 millones fueron marcados para revisión por sus máquinas y un 76% fueron eliminados antes de ser vistos una sola vez. ¿Ha sido suficiente? Parece que no.
Un clip pornográfico de contenido explícito llegó a permanecer en youtube de 2015 a 2017, obteniendo más de 24 millones de visitas
Pero el alojamiento externo no es el único problema con el porno de youtube. Centenares de cuentas suben contenido pornográfico y subido de tono diariamente. Es una especie de porno volátil que dura los que duran los reportes de humanos o bots. Que no son automáticos. Este margen de maniobra es suficiente cuando la fuerza bruta de miles de cuentas trabajan para ello. Una especie de juego que excita a miles de usuarios que utilizan youtube para localizar contenido para adultos.El procedimiento es también sencillo, canales que eligen unas tags específicas (algunas veces incluso en gaélico, otras codificadas) y que suben el contenido sin publicitarlo. Solo con acceso desde el buscador. Desde redes externas se dan las tags codificadas para acceder a sus canales. Un juego que trae de cabeza a los ingenieros de Youtube.
Decenas de cuentas utilizan etiquetas clave para subir contenido explícito a Youtube que luego puede ser localizado desde redes sociales
Cuando estas tags se descubren los bots trabajan con eficiencia en bloquear contenido y desaparece el material. Pero a tag muerta, tag puesta.
Por ejemplo. Se pueden encontrar artículos donde se denuncian estas prácticas usando las tags 'Pron' o 'onrop' (porno al revés). Todavía queda el resquicio de unos cuantos canales. O incluso aquellos que usaron hace un par de años el gaélico para subir sus vídeos pornográficos bajo palabras como "scannáin" o con títulos en irlandés para esconder decenas de vídeos. El truco está en utilizar una rotación constante en las etiquetas de búsqueda. Muchos youtubers han denunciado esta 'técnica del titulaje' para esconder contenido explícito:
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Otro caballo de batalla de la plataforma con el porno lo tiene en la publicidad. Hace tan solo unos días muchos usuarios denunciaron como aparecían anuncios que redirigían hacia webs de contenidos para adultos en muchos vídeos de la plataforma. A pesar de que la política de publicidad de Google AdWords lo prohíbe muchos anunciantes aprovechan ese margen de maniobra entre que los bots actúan para colar sus webs porno. Si les cierran la cuenta abren otra.
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Quizás el problema más grave de youtube con el porno sea aquel que busca hacer daño intencionadamente para desprestigiar a la plataforma. Y para ello usan a los niños como víctimas y la imposibilidad de denunciar las listas de reproducción.Hace poco un medio denunció que algunos usuarios estaban creando listas de reproducción con vídeos de contenido infantil que terminan con otros pornográficos. La pesadilla de cualquier padre. Dejar a tu hijo entretenido con una lista de reproducción de dibujos que termina en un bukake.
No se puede ser más malvado.
