La canciller alemana, Angela Merkel, volvió a sufrir esta mañana un visible temblor en manos y piernas durante el acto celebrado en el palacio de Bellevue, en Berlín.
Merkel se encontraba en la sede de la Presidencia del país para asistir al acto de cese ante el jefe del Estado, Frank-Walter Steinmeier, de la ya exministra de Justicia alemana Katharina Barley, que se marcha a Bruselas, y al nombramiento de su sucesora, Christine Lambrecht.
En las imágenes difundidas por las cadenas alemanas, se puede ver como la canciller, que el próximo 17 de julio cumplirá 65 años, trata de contener los temblores y poco después rechaza un vaso que le ofrece un asistente.
La semana pasada Merkel trató de restar importancia a las especulaciones desatadas sobre su estado de salud tras un episodio similar al de esta mañana, cuando se la vio intentando controlar un temblor de manos y piernas mientras recibía al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, de visita de trabajo en Berlín.
Las imágenes de la canciller bajo el sol, con signos de debilidad física y sujetándose repetidamente las manos para tratar de calmar el temblor, durante aproximadamente medio minuto y mientras sonaba el himno alemán, se convirtieron rápidamente en objeto de comentarios en los medios alemanes.
"Estoy bien, me he bebido al menos tres vasos de agua, que parece que me faltaban, ahora me siento de nuevo bien", dijo más tarde la canciller, que atribuyó su temblor a un supuesto problema de deshidratación, al ser preguntada por esa cuestión en una comparecencia conjunta con Zelenski.
A diferencia del acto con el presidente ucraniano, que tuvo lugar al aire libre, en el patio de Cancillería, el de hoy se celebró en el interior del palacio de Bellevue.
Alemania está atravesando estos días una ola de calor con temperaturas ayer de casi 39 grados en algunos puntos del país, aunque el tiempo promete para hoy y mañana una pequeña tregua hasta el fin de semana, donde se vuelven a esperar temperaturas similares a las del miércoles.