Mohamed Lahouaiej Bouhlel, el atacante de Niza sin atecedentes por terrorismo, no era un "buen musulmán", además tomaba alcohol, carne de cerdo y drogas. Así lo ha asegurado uno de sus primos en una entrevista con el rotativo británico The Daily Mail. "No iba a la mezquita, no rezaba, no ayunaba en Ramadán, de hecho, tomaba alcohol, carne de cerdo y drogas”, ha revelado. Además, según su familiar Bouhlel no tenía estabilidad mental, era agresivo y con frecuencia golpeaba a su exesposa con la que tuvo tres hijos; razón por la que ésta decidió divorciarse.
El atacante, abatido en el mismo Paseo de los Ingleses de la ciudad francesa donde provocó la muerte de al menos 84 personas, había perdido su trabajo por dormir mientras conducía y chocar contra cuatro coches aparcados, provocando daños inmensos que le costaron su empleo. Por sus conductas agresivas, Bouhlel era conocido por la Policía de Niza, pero no estaba en la lista de posibles terroristas o personas en peligro de ser radicalizadas por elementos extremistas como los que siguen la ideología del grupo terrorista Estado Islámico.
Bouhlel vivía en Francia desde el año 2007 y contaba con permiso de residencia desde 2009. Nacido en Túnez en 1985, se había separado de su mujer, con la que había tenido descendencia y se estableció desde el primer momento que llegó a Francia en Niza.
Una decena de vecinos le describen como "solitario" y "silencioso". Al parecer, el atacante subía siempre a su apartamento con su bicicleta y aparcaba cerca una pequeña furgoneta de reparto. Según los testimonios del vecindario, el terrorista no tenía una apariencia religiosa y vestía habitualmente en pantalones cortos. Otros vecinos subrayan que nunca devolvía el saludo.
