Boris Johnson ha renunciado a su cargo como líder del Partido Conservador, pero pretende aferrarse a la silla de primer ministro de Reino Unido, el menos, hasta otoño. No solo quería seguir al frente del Gobierno británico porque, según el 'premier' es "el mejor trabajo del mundo", sino que habría planteado celebrar su boda este mes de julio en una de las residencias campestres que pueden utilizar los dirigentes del país.
Johnson se casó el año pasado con su mujer, Carrie, con la que tiene dos hijos. La celebración consistió en una pequeña ceremonia con 30 personas debido a las restricciones por la covid, pero se plantearon volver a celebrarla este verano.
Según 'The Guardian', Johnson y su esposa ya habrían enviado las invitaciones a los asistentes para que reservasen la fecha para una fiesta en Chequers, la residencia campestre fuera de Londres de los primeros ministros.
La celebración iba a ser a finales de este mes, después de que el año pasado tuviese lugar, en secreto, la ceremonia en la Catedral de Westminster. La fiesta tuvo lugar, entonces, en el jardín de Downing Street. Solo se publicó una fotografía oficial.
La boda de Boris Johnson y su dimisión
Ahora, habrá que esperar para saber si Johnson continúa en el cargo y si, al permanecer en el 10 de Downing Street decide seguir adelante con su evento.
