El caso Madeleine McCann ha dado un giro en las últimas horas. Una joven polaca, Julia Faustyna, cree que es la pequeña que desapareció el 3 de mayo de 2007 en el Algarve portugués. Han pasado más de 15 años desde ese momento y ahora vuelve a estar en el punto de mira después de que esta chica de 21 años esté aportando pruebas en una cuenta de Instagram.
Cuando se produjo la desaparición se encontraron gotas de sangre en el piso que pertenecían a Madeleine. Por este motivo, las autoridades consideraron que la niña fue golpeada. A pesar de ello, esta prueba no era suficiente para saber si había sido secuestrada o asesinada.
Las primeras investigaciones
En los primeros meses de la desaparición de Madeleine McCann hubo varios sospechosos por el secuestro. Entre ellos se encontraba un hombre de nacionalidad inglesa. En ese momento el hombre vivía cerca del apartamento en el que se alojaban los McCann, aproximadamente a 100 metros.
Sin embargo, a los 14 meses fue descartado después de que las autoridades registraran la casa. Además, este hombre llegó a presentar una denuncia contra la prensa inglesa.
Los padres de Madeleine también fueron señalados
Los padres, Kate y Gerry McCann, también estuvieron en el punto de mira. El excomisario de Portugal, Gonçalo Amaral los señaló como responsables de la desaparición de la pequeña. Lo hizo en un documental, en un libro y en una entrevista.
Los McCann demandaron al luso y a Portugal, pero el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) en 2022 concluyó que el Estado de Portugal no había violado los derechos de los progenitores tras las declaraciones de Amaral porque en su momento las autoridades los consideraron sospechosos de la desaparición.
Christian Brueckner, el principal sospechoso
A día de hoy, las pruebas señalan como responsable de la desaparición y el posible asesinato de Madeleine McCann a Christian Brueckner. Se trata de un alemán de 45 años acusado por diversos delitos como abuso de menores. Ahora está cumpliendo condena en la cárcel alemana de Wolfenbüttel.
Todas las miradas se pusieron en Brueckner porque la policía le sitúo cerca de la zona en la que se produjo la desaparición de la pequeña. Supuestamente, el alemán estuvo hablando con su teléfono móvil durante media hora en el momento de la desaparición.
Por el momento las autoridades no han podido acusarle formalmente de este suceso, pero en estos últimos años sí que han transmitido que "tienen pruebas concretas" contra él. Según se recoge en el diario The Sun, el investigador que está al frente del caso, Hans-Christian Wolters, afirmó que hay "nuevos hechos y nuevas pruebas del caso". No se tratan de pruebas forenses, pero son unas pruebas que les permiten estar seguros de que Christian Brueckner "es el asesino de Madeleine McCann".
Además, en una entrevista para el medio portugués de investigación Sábado, Wolters afirmó: "Estamos seguros de que mató a Madeleine".
Julia Faustyna cree que es Maddie
En los últimos años, muchas personas han creído ver a Madeleine McCann en diferentes partes del mundo, pero todas esas pistas han resultado ser falsas. Ahora, Julia Faustyna asegura que es la pequeña Maddie. Esta joven reside en Alemania con su familia que, según ella, se han negado a dar detalles sobre su pasado. Su testimonio se ha hecho viral en las redes sociales.
Julia comparte diferentes sospechas que le hacen pensar que es la niña desaparecida en Portugal en 2007. Una de estas pruebas que aporta es que ella tiene la misma marca en el ojo que Madeleine McCann. Además, está haciendo comparativas físicas de ella con Kate y Gerry McCann.
La joven solicita una prueba de ADN que le resuelva si es Madeleine McCann y ponga fina a uno de los casos más mediáticos en los últimos tiempos.
¿Quieres participar en la conversación?