Los nueve bomberos del Consorcio Provincial de Málaga que se desplazaron a Turquía para participar en las labores de rescate tras el terremoto han recordado que "la tragedia continúa", por lo que han hecho un llamamiento a la sociedad y las instituciones para seguir ayudando en el país.
"Es muy importante el trabajo que hay que hacer después del foco mediático. Es verdad que cuando ocurre un catástrofe la sociedad se implica y empatiza mucho con los afectados, pero cuando pasa ese foco todo se empieza a diluir y la curva empieza a bajar", ha advertido María García, bombera que ha formado parte de este equipo.
"Se necesita apoyo institucional", ha dicho García, que ha reconocido que quieren volver a Turquía "cuanto antes mejor", para seguir colaborando y aportar su "granito de arena".
Otro de los bomberos malagueños que ha viajado a Turquía, Pedro Luque, ha asegurado a EFE que ha sido la mayor catástrofe en la que han participado debido a la envergadura del terremoto, pero ha destacado la solidaridad de todas las personas que intentaban ayudar.
"Cada uno aportaba lo que podía", ha señalado Luque, que ha resaltado el trabajo de todos los traductores que se ofrecían a colaborar y se han desplazado a la zona para ayudar, porque el idioma era otro gran problema al que se tenían que enfrentar.
"No teníamos palabras puente, necesitábamos a los traductores", ha subrayado Pedro Luque, que ha hecho hincapié en que la ayuda de traducción "ha facilitado mucho las labores humanitarias", aunque "cuando hay voluntad, el idioma es universal".
Los bomberos malagueños desplazados hasta Turquía lo han hecho en compañía de cuatro perros, Kruger, Maya, Gollum y Zeus, que han sido fundamentales en la búsqueda de supervivientes.
María García ha insistido en que su "corazón sigue en Turquía" y ha recordado que el desastre empezó con el terremoto, pero "la tragedia de la supervivencia de esas familias y de la recuperación de sus vidas empieza ahora".
Ha lamentado la cantidad de niños que se han quedado huérfanos y el peligro que corren si no se tiene un control de los mismos debido a las mafias. "No lo quiero ni pensar", ha precisado García, que ha afirmado que se necesitan centros de acogida y orfanatos y "que los organismos controlen todo eso con gente responsable".
Ha reconocido que no le gusta que les llamen héroes, puesto que su profesión es "muy vocacional": "Somos bomberos por vocación y cuando hay este tipo de catástrofes todos queremos poner nuestro granito de arena", ha remarcado.
Javier Luque, otro de los bomberos desplazados a Turquía, ha destacado a EFE lo importante que es el trabajo previo, antes de viajar al epicentro de la catástrofe, y por eso ha reivindicado los cursos que "sirven para formarse, especializarse e intentar evitar riesgos".
Francisco Javier Luque Sánchez, Pedro Luque Cruz, José Antonio Solano Cárdenas, Jair Pereira Rodríguez, Jorge Marín Delgado, María García Fernández, Antonio Manuel Cobos Manzano, Lorenzo Álvarez Rojo y Jaime Navarro Ortuño, son los nueve bomberos malagueños que han participado en las labores de rescate en Turquía.
La Diputación de Málaga entregará un reconocimiento especial a los nueve efectivos, distinción que se les otorgará en el marco de la ceremonia de los premios ‘M de Málaga’, que se celebrará con motivo del Día de Andalucía, el 27 de febrero.
El presidente de la institución provincial, Francisco Salado, ha recibido este martes a los nueve bomberos y asegurado que "estos héroes, de los que siempre presumimos porque los admiramos de verdad, representan lo mejor de la sociedad, lo mejor de todos y cada uno de nosotros, el espejo en el que nos gustaría mirarnos".
