Más de 9.800 puntos de votación han abierto ya sus puertas para los más de 13,3 millones de neerlandeses llamados este miércoles a las urnas para elegir, de entre 26 partidos, a los que formarán la próxima coalición de gobierno, en un Países Bajos que abre así nueva era tras 13 años de legislaturas consecutivas del liberal Mark Rutte.
La gran mayoría de los colegios electorales, que en Países Bajos también se sitúan en lugares peculiares como museos, estaciones de tren o bibliotecas, están abiertos desde las 07.30 hora local hasta las 21.00. También hay colegios electorales móviles, que permanecen en un lugar durante unas horas y luego se desplazan a otros puntos.
Un total de 1.128 candidatos (el 36% son mujeres) de 26 partidos políticos concurren a estas elecciones legislativas, que fueron convocadas de forma anticipada tras la caída del cuarto gobierno consecutivo de Rutte el pasado julio después de una crisis interna sobre la política migratoria. Las encuestas dan al menos un escaño a un total de 16 partidos, según recoge EFE.
Encuestas
Los diferentes líderes políticos hicieron campaña hasta este martes, acechando a los votantes indecisos, después de un giro a última hora en las encuestas publicadas el mismo día, que igualaban a la derecha y a un bloque de izquierdas, y recogían una amenaza real de la ultraderecha a unas horas de abrir las urnas.
Según Peilingwijzer, una combinación de encuestas sobre intención de voto, la ultraderecha de Geert Wilders (PVV) sube a entre 22 y 28 escaños, acercándose al liberal de derechas VVD, de la política turco-neerlandesa Dilan Yeşilgöz, que espera 26-30 escaños.
El bloque formado por socialdemócratas (PvdA) y la izquierda verde (GroenLinks), encabezado por el exvicepresidente de la Comisión Europea Frans Timmermans, está entre 21-25 escaños, mientras que el democristiano NSC, liderado por Pieter Omtzigt, ha bajado en los últimos días en las encuestas hasta 19-25 diputados.
El cambio más grande que se ha producido en la última semana es el repentino ascenso de Wilders en las encuestas, lo que llegó después de que este afirmara que su prioridad ya no es evitar lo que llama la “islamización” de Países Bajos porque los neerlandeses “tienen problemas más importantes” ahora, en un guiño a Yeşilgöz, que no le descartó como socio. Esto ha llevado a Timmermans a tratar de movilizar a los votantes con advertencias sobre el avance de la ultraderecha, lo que parece estar funcionando, según las encuestas, que señalan que hasta este martes aún había un gran porcentaje de indecisos. “No me quiero despertar el jueves en un país donde Wilders es el líder del partido más grande del país”, alertó.
La participación en las últimas elecciones generales en 2021, también después de la caída en bloque del tercer gobierno de Rutte, entonces por un escándalo de discriminación institucional por parte de la Agencia Tributaria, ascendió a un 78,7%, pero fue ligeramente inferior a los comicios de 2017, cuando participó el 81,9% del electorado.
