Estados Unidos, principal promotor de la OTAN, ha sido la potencia que más armas y hombres han desplazado a Europa del Este por el conflicto entre Ucrania y Rusia. Sin embargo, la zona de influencia que más preocupa a la potencia norteamericana sigue siendo el Pacífico. Desde finales del siglo XX, los estrategas mundiales y expertos en geopolítica coinciden en el desplazamiento del tablero de ajedrez global a la zona Asia-Pacífico.
Desde la década de 1990, el espectacular crecimiento de China ha alarmado a Estados Unidos y a sus tradicionales socios del Pacífico como Japón y Australia. Con el despertar del 'Gran Dragón', algunos de los estados vecinos se han sentido intimidados por el crecimiento y expansionismo de la segunda potencia mundial. Esta semana, Estados Unidos ha aprobado una venta de equipos armamentísticos por valor de 100 millones de dólares a la isla autónoma de Taiwán. Este paquete está destinado para “sostener, mantener y mejorar” el sistema de defensa antimisiles Patriot empleado por el pequeño país reclamado por China.
“Esta propuesta de venta sirve a los intereses nacionales, económicos y de seguridad de los Estados Unidos al apoyar los continuos esfuerzos del receptor para modernizar sus fuerzas armadas y mantener una capacidad defensiva creíble”, señaló el Pentágono. Por su parte, el Ministerio de Defensa de Taiwán afirmó que la decisión de obtener misiles Patriot más nuevos se tomó durante una reunión de 2019 durante la presidencia de Donald Trump.
Aviones chinos y buques estadounidenses
Durante los últimos meses, Taiwán se ha quejado de continuas incursiones de aviones militares chinos en su espacio aéreo: “Nuestra fuerza aérea interceptó aviones, emitió advertencias de radio y desplegó sistemas de defensa aérea contra misiles para supervisar las actividades de los aviones militares”, denuncio a finales de enero el gobierno taiwanés. En aquella ocasiones, se detectaron 34 cazas, un bombardero y cuatro aeronaves de inteligencia electrónica, y se produjeron un día después de que fuerzas estadounidenses y japonesas realizaran maniobras conjuntas al este de la isla.
Los funcionarios estadounidenses han estado presionando a Taiwán para que modernice su ejército ante un posible enfrentamiento con China, quien mira con recelo estas ventas. Según informó la agencia Reuters, el embajador de China en Estados Unidos señaló el mes pasado que las dos superpotencias podrían terminar en un conflicto militar si Washington fomenta la independencia de Taiwán.