Los arrecifes de coral representan un tercio de toda la biodiversidad en los océanos y son vitales para la humanidad. Pero los estresores humanos de largo recorrido, incluidos la escorrentía agrícola, la sobrepesca y el calentamiento oceánico más reciente debido al cambio climático, han contribuido a la extinción de los arrecifes de coral a gran escala.
"Los ecosistemas de arrecifes de coral ahora parecen desmoronarse ante nuestros ojos, con brotes cada vez más intensos de enfermedades de los corales y blanqueamiento que amenazan la persistencia de los hábitats de arrecifes y la inmensa biodiversidad que sustentan", explica Katie Cramer, profesora asistente de investigación en el Instituto Global Julie Ann Wrigley de Sostenibilidad en la Universidad Estatal de Arizona y miembro de Ocean Science Fellow en el Centro de Océanos de Conservation International.
El trabajo de Cramer se centra en la reconstrucción del cambio a largo plazo en los ecosistemas de los arrecifes de coral mediante la combinación de datos de encuestas paleoecológicas, históricas y modernas para identificar los mecanismos de declive de los arrecifes e informar los esfuerzos de conservación.
En su intervención en la Reunión Anual de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS 2002) bajo el título 'Arrecifes de coral: siglos de impacto humano', Cramer describe la evidencia de las huellas humanas de hace mucho tiempo que prepararon el escenario para las recientes extinciones de arrecifes de coral que estamos presenciando en la actualidad.
"Volver a la escena del crimen"
"Estoy interesada en volver a la escena del crimen cuando los humanos comenzaron a impactar los arrecifes de coral hace siglos a milenios, para entender cuándo, por qué y cuántos arrecifes han sido alterados por los humanos", añade Cramer.
Sus estudios han examinado los orígenes de la disminución de los arrecifes de coral del Caribe mediante el seguimiento de los cambios en los últimos 3.000 años en la composición de una variedad de fósiles encontrados en los núcleos de sedimentos de arrecifes que recolectó de Panamá, incluidos esqueletos de coral, dientes de pescado, espinas de erizo, conchas de moluscos, y otros.
Estos estudios revelaron que los impactos humanos locales de larga data, como la pesca y la agricultura, han estado alterando profundamente los arrecifes al menos siglos antes de la enfermedad y las epidemias de blanqueo que comúnmente se mencionan como impulsores de la pérdida de coral.
Además, Cramer también presentará la primera evidencia de su estudio que reconstruyó los cambios en las comunidades de coral de los arrecifes en todo el Caribe, que abarca desde el período prehumano hasta el presente.
Este trabajo revela que las comunidades de coral estaban siendo transformadas por actividades humanas mucho antes de lo que se pensaba.
Su esperanza es que al escuchar los ecos del cambio ambiental pasado en los arrecifes de coral, los esfuerzos de Cramer puedan informar mejor los esfuerzos de conservación en un período de intensificación de las amenazas causadas por los humanos.
"Necesitamos resolver por qué y cuánto han cambiado los arrecifes de coral a lo largo de la historia humana para informar nuestras respuestas a la crisis actual de los arrecifes. Necesitamos entender cómo los arrecifes han respondido a los cambios pasados para asegurar su persistencia en el futuro", señala Cramer.