El primer ministro de Italia, Guiseppe Conte, ha informado de que tiene la "previsión razonable" de aplicar a partir del 4 de mayo un plan para rebajar las restricciones impuestas por la pandemia del nuevo coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan.
"Antes del fin de semana confío en comunicarles este paso e explicarles los detalles de este programa articulado. Una previsión razonable es que lo apliquemos a partir del próximo 4 de mayo", ha avanzado el 'premier' italiano, en un mensaje publicado en su cuenta de la red social Facebook para explicar los planes de su Gobierno de rebajar las restricciones por el coronavirus.
Conte ha dicho que las restricciones por la pandemia están prorrogadas hasta el 3 de mayo y ha señalado que entiende la preocupación de las empresas y de los ciudadanos por la necesidad de recuperar la normalidad.
Ha dejado claro que a él le gustaría anunciar ya que la normalidad se recuperará "mañana por la mañana", pero ha dejado claro que la rebaja de las restricciones debe hacerse con responsabilidad y siguiendo las recomendaciones de los expertos.
"Me gustaría poder decir: reabrimos todo. Rápido. Lo retomamos mañana por la mañana. Este Gobierno ha puesto en primer lugar la protección de la salud de los ciudadanos pero tampoco es insensible ante el objetivo de preservar la eficiencia del sistema productivo", ha afirmado.
Una retirada "gradual"
El primer ministro italiano ha dicho que sería "irresponsable" retirar todas las restricciones y ha hecho hincapié en que hay que una decisión así podría hacer que la curva de contagios volviera a aumentar y dejaría anulados "todos los esfuerzos" realizados en la lucha contra la Covid-19.
En este sentido, ha señalado que en esta nueva fase de gestión de la pandemia los italianos no se pueden permitir "actuar con improvisación" ni "abandonar la línea de la máxima cautela", "tampoco en la perspectiva de la vuelta a la normalidad".
"La flexibilización de las medidas", ha subrayado, "debe realizarse sobre la base de un plan bien estructurado y articulado". "Debemos reabrir sobre la base de un programa que tome en cuenta las consideraciones de todos los detalles y que cruce todos los datos. Un programa serio y científico. No podemos permitirnos dejar fuera nada en particular", ha explicado.
Riesgo de que aumenten los contagios
Conte ha advertido de que la flexibilización de las restricciones conlleva "el riesgo concreto" de que vuelvan a aumentar los contagios y ha recalcado que los italianos tienen que estar "preparados" para contener una tendencia así "en los niveles mínimos", de tal modo que el riesgo de nuevas infecciones resulte "tolerable" teniendo en cuenta las capacidades hospitalarias del país.
A modo de ejemplo, ha dicho que no hay que limitarse a "pretender" que una empresa cumpla los protocolos de seguridad en el centro de trabajo sino que hay que valorar el flujo de empleados que la reapertura de esa misma compañía genera, así como los porcentajes de trabajadores que usan transporte público o privado, sus horarios y otros detalles similares.
El primer ministro italiano ha señalado que el "programa" para la rebaja de las restricciones "tiene que tener una impronta nacional" porque debe contemplar una "reorganización" de las formas en que se trabaja, el transporte y las "nuevas reglas para las actividades comerciales".
Aunque será un programa "nacional", tendrá también "peculiaridades territoriales" por las diferencias entre regiones en cuestiones como medios de transporte o camas en hospitales. "Es por ello que tenemos un grupo de expertos que están trabajando con nosotros noche y día", ha indicado.
Conte ha dicho que el equipo está formado por los doctores Angelo Borrelli y Domenico Arcuri y el profesor Silvio Brusaferro, entre otros científicos y expertos sanitarios, y ha explicado que se encargará de realizar un análisis científico de la curva epidemiológica para determinar las "medidas de contención del contagio" y "de reducción del riesgo".
"Es muy fácil decir 'Abrimos todo' pero los buenos propósitos se traducen en la realidad de nuestro país teniendo en cuenta toda nuestras potencialidades pero también los límites que conocemos bien", ha afirmado el jefe del Gobierno italiano.
Conte ha indicado que, en los próximos días, el Gobierno analizará "a fondo" la fase de "reapertura" y profundizará en "todos los detalles". "Asumiremos la responsabilidad de las decisiones, que corresponde al Gobierno y que no pueden ser requeridas a los expertos, que son los que ofrecen una base de valoración", ha resumido.
El primer ministro italiano ha dicho que el Gobierno adoptará las decisiones con "coraje, lucidez y determinación", pensando "en el exclusivo interés del país", sin que "se creen divisiones". "Debemos salir unidos y mantener alto el espíritu de comunicad. Esa es nuestra fuerza", ha recalcado.
Hasta la fecha, la pandemia del nuevo coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan ha dejado en Italia a más de 181.000 personas contagiadas y ha acabado con la vida de más de 24.000 personas, según el balance de la Universidad Johns Hopkins.