Internacional

JMJ: la cita del Papa con los jóvenes que deja 400 millones en el país anfitrión

Según un análisis de la consultora PwC y del Instituto Superior de Economía y Gestión portugués, la JMJ 2023 dejará entre 411 y 564 millones de euros de beneficio en Portugal

  • El papa Francisco es recibido por la multitud a su llegada al Palacio de Belem para ser recibido por el presidente de Portugal, durante la JMJ de Lisboa -

La Iglesia católica celebra estos días (del 1 al 6 de agosto) uno de sus eventos más importantes para sus fieles: la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el encuentro entre los jóvenes y el Papa, que suele celebrarse cada tres años. Cada vez que se celebra, se elige una ciudad de difrentes partes del mundo, la ciudad de acogida. Este año, el destino elegido, como todos sabrán ya, ha sido Lisboa.

Hasta la ciudad portuguesa se han acercado casi 600.000 jóvenes de todo el mundo, aunque principalmente de Europa, para pasar unos días compartiendo la fe y escuchando al Papa. En estos eventos, aunque la inversión del país de acogida es grande, el beneficio económico final es todavía mayor. La media de los últimos años es de unos 400 millones de euros en el país en el que se celebra, según diversos estudios económicos.

Pongamos como referencia la que se está celebrando precisamente este verano. Según un análisis de la consultora PwC y del Instituto Superior de Economía y Gestión portugués, el evento religioso dejará en el país entre 411 y 564 millones de euros de beneficio. Aunque la empresa experta considera que si ampliamos y hablamos de bienes y servicios ligados a otras actividades ligadas a la JMJ el beneficio podría llegar a alcanzar entre 811 y 1.100 millones de euros.

Para hacer este cálculo, la consultora se ha basado en los gastos de alojamiento, alimentación, comercio, transporte y otros de los participantes, así como la inversión asociada a la organización del encuentro. Además, señalan que "el estudio abarca los eventos de la JMJ, entre el 1 y el 6 de agosto, así como las Jornadas en las Diócesis, que tienen lugar en la semana anterior a la Conferencia, y estancias adicionales a los días previstos de la reunión, en el caso de algunos participantes extranjeros".

Más desglosado. Los economistas creen que durante las jornadas propias de la JMJ, los más jóvenes no gastarán tanto dinero en consumo personal, pero sí lo harán transporte y estancia. Los más mayores, sobre todo los que llegan del norte de América, sí se dejarán más dinero en otro tipo de gastos personales como restauración.

La estimación es que los peregrinos y los voluntarios se van a gastar entre 30 y 163 euros cada día. En total, este grupo se gastaría entre 235 y 397 millones de euros. A este gasto hay que sumarle lo que paga la propia Iglesia católica y algunos organismos e instituciones del país, haciendo que el beneficio vaya a llegar hasta esos 411 y 564 millones.

Además, si se compara con lo que le cuesta al Estado, el beneficio de la JMJ es proporcionalmente mayor. Estas jornadas 'sólo' le han costado a Portugal unos 80 millones de euros (aproximadamente y todavía sin el Presupuesto oficial): al Estado luso, 36,5 millones, y a los ayuntamientos de Lisboa y la vecina Loures 35 y 9 millones, respectivamente. Aparte, la Iglesia cree que hará tenido que hacer una inversión total de 80 millones.

Y por último, aparte del beneficio en la ciudad donde se celebra la JMJ, hay que tener en cuenta el beneficio secundario de los países y ciudades de alrededor, que se ven muy beneficiados por ser satélites de un acto tan multitudinario.

La JMJ de Madrid

En el año 2011, la JMJ se celebró en Madrid y acogió a medio millón de peregrinos del mundo entero. La misma consultora PxC hizo también un estudio del impacto económico de estas jornadas para nuestro país. En ese caso, se sabe ya con certeza que se crearon 4.589 puestos de trabajo en todo el país, de los que 2.894 fueron en Madrid, que tuvo un impacto total de 354 millones de euros para España (sobre todo para Madrid que ganó 207 millones) y que costó en total 50 millones de euros. Un evento más que rentabilizado.

El origen de la JMJ se remonta a 1984, cuando el Papa Juan Pablo II quiso organizar un acto el Domingo de Ramos, en Roma, para encontrarse con los jóvenes de la Iglesia católica. La idea fue un éxito: se esperaban 60 mil peregrinos y respondieron a la llamada 250 mil de muchos países. Fue tan significativo, que el Papa quiso repetirlo al año siguiente, pero en vez de un encuentro puntual de unas horas un sólo día, decidió hacerlo durante varias jornadas. Ese mismo año de 1985, Juan Pablo II escribió una Carta Apostólica a los jóvenes del mundo y anunció, el 20 de diciembre, la institución de la Jornada Mundial de la Juventud.

Se ha celebrado en Roma (1986), en Buenos Aires (1987), en Santiago de Compostela (1989), Czestochowa, Polonia (1991), en Denver (1993), en Manila (1995), en París (1997), en Roma de nuevo (2000), en Toronto (2002), en Colonia (2005), En Sídney (2008), en Madrid (2011), en Río de Janeiro (2013), en Cracovia (2016), en Panamá (2019) y en Lisboa (2023). Y en todos los casos el beneficio ha superado con creces al gasto.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli