La Fiscalía había solicitado una pena de cinco años para el hombre y 30 meses para su mujer. Sin embargo, un tribunal de la localidad de Grasse, en el sur del país, ha impuesto una pena de seis años para él y tres para ella.
La pareja, que tendrá que devolver los 60.000 euros obtenidos, había asegurado que se encontraba cerca del Estadio de Francia, en París, la noche en que los terroristas detonaron las bombas en las inmediaciones. Sin embargo, ambos estaban a más de 900 kilómetros de la capital francesa, en la localidad de Antibes.
La Fiscalía, que ha informado de que la pareja utilizó el dinero para comprar varios vehículos, ha indicado que las facturas de los teléfonos móviles de los acusados mostraban que ninguno de ellos había estado en París la noche de los ataques, que se saldaron con 130 muertos.
