Un grupo de migrantes de la caravana de centroamericanos que avanzó hoy hacia el puesto de San Ysidro (EE.UU.), entre San Diego y Tijuana (México), intentó cruzar la frontera por otros puntos, donde la policía fronteriza estadounidense les lanzó gas lacrimógeno.
Centenares de migrantes rompieron hoy un cerco de la Policía Federal mexicana con la intención de llegar a la garita de El Chaparral, en la frontera de la mexicana Tijuana con San Ysidro (Estados Unidos).
Un grupo de ellos treparon la primera valla que divide ambos países y la policía fronteriza estadounidense les lanzó gases lacrimógenos, como constató Efe, lo que obligó a la mayoría de ellos a replegarse.
Cierre del paso de personas
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ha cerrado al tráfico el paso fronterizo de San Ysidro que comunica San Diego.
El paso está cerrado en ambas direcciones en este punto, uno de los más transitados de la veintena de accesos entre ambos países. Por el momento se desconoce el motivo del cierre, aunque en el lugar había cientos de migrantes procedentes de Centroamérica que pretendían pedir asilo en Estados Unidos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha mostrado su descontento con la caravana a medida que se aproximaba a su país y ha desplegado efectivos militares en la frontera para apoyar a la Patrulla Fronteriza.