El exvicepresidente de Estados Unidos, el republicano Mike Pence (2017-2021), ha presentado la documentación ante la Comisión Federal de Elecciones de EE.UU. para concurrir a las primarias del Partido Republicano con tal de ser su candidato en las elecciones generales de 2024.
Con este movimiento, Pence agita el avispero entre las filas del partido, donde los principales nombres que sonaban en las quinielas para batirse por el liderazgo eran los de Ron DeSantis, gobernador de Florida, y el propio expresidente, Donald Trump. El nuevo candidato a encabezar a los republicanos confirma así su rebelión contra el magnate, que sentencia una relación que ya se encontraba en caída libre.
Pence tiene previsto lanzar oficialmente su candidatura con un discurso este miércoles en Iowa, según medios de comunicación.
Además de Trump y Pence también figuran en la nutrida lista de precandidatos republicanos junto a Ron DeSantis o Nikki Haley. Las encuestas sitúan a Trump a la cabeza en las preferencias republicanas (53 por ciento), seguido de DeSantis (26 por ciento) y con Pence en un modesto tercer lugar (6 por ciento).
En los últimos meses Pence ha realizado varias visitas a estados clave de las primarias como Carolina del Sur o New Hampshire, aunque se ha concentrado especialmente en Iowa, primer lugar donde se celebran elecciones primarias del Partido Republicano.
El asalto al Capitolio: punto de inflexión en la relación Trump-Pence
Los hechos ocurridos en enero marcaron el cisma entre el dúo republicano. En una entrevista con la cadena ABC, Pence acusó de ponerle en peligro tanto a él como a su familia y al resto de trabajadores del Capitolio al azuzar el levantamiento, ya que en ese momento se encontraba en el edificio para certificar los resultados electorales que abrieron a Biden las puertas de la Casa Blanca.
El entonces vicepresidente no anuló la certificación de votos y Biden resultó finalmente el vencedor de los comicios. La actuación, aunque esperable, desató la ira entre las filas trumpistas, que no tardaron en tildar de 'traidor' a Pence. Desde entonces, la amistad entre ambos sufrió una grieta irreparable, cargada de reproches de Trump hacia su exvicepresidente que, ahora, amenaza con arrebatarle el liderazgo republicano.
Implicado en la polémica de los documentos clasificados
El Departamento de Justicia de Estados Unidos decidió el pasado 2 de junio archivar la investigación sobre la documentación confidencial que se halló en el domicilio del exvicepresidente Mike Pence en Indiana, por lo que no presentará cargos.
La Fiscalía informó a través de carta a los abogados de Pence de que a raíz de los resultados de la investigación, decidió archivar el caso, según ha sabido la cadena NBC tras consultar a una fuente del Departamento de Justicia.
Desde el círculo cercano del que fuera 'número dos' de Donald Trump contaron que la noticia, si bien no les ha sorprendido, fue recibida con alivio, especialmente en el contexto de que Pence iba a lanzar su candidatura.
Más tarde, el expresidente Trump, quien también se ha visto involucrado en un caso de posible apropiación de documentos clasificados y que está investigado por ello, celebró la decisión de la Fiscalía, pues supone que también le exonerará a él.
"Acaban de anunciar que no van a presentar cargos contra Mike Pence por bulo sobre los documentos. Esto es genial pero, ¿cuándo voy a ser totalmente exonerado?" apuntó Trump en su perfil oficial de la red social Truth Social. "Soy al menos tan inocente como él", se defendió.