La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Arden, anunció hoy que su país prohibirá las armas militares y semiautomáticas, como las que se usaron en el ataque supremacista del pasado viernes, mientras la Policía ha identificado a todas las víctimas.
En una comparecencia televisada, Ardern explicó que espera que la nueva ley sobre uso de armas esté lista el próximo 11 de abril, una iniciativa que ha recibido un amplio apoyo ciudadano tras la matanza de 50 personas en dos mezquitas.
"Ahora, seis días después del ataque, vamos a anunciar una prohibición de todos los rifles de asalto y semiautomáticos de estilo militar (MSSA, sigla en inglés) en Nueva Zelanda", dijo la mandataria.
"Todas las armas semiautomáticas de estilo militar usadas durante el ataque terrorista del viernes 15 de marzo serán prohibidas", agregó Arden, al precisar que el proyecto de ley se presentará ante el Parlamento cuando se reúna en abril próximo.
Asimismo se prohibirán los cargadores de alta capacidad y las piezas que se utilizan para que algunos rifles no semiautomáticos se transformen en MSSA, como presuntamente sucedió durante el ataque con un rifle modificado.
La propuesta legislativa incluye excepciones, como en el control de plagas y las competiciones internacionales de tiro de la Policía y las Fuerzas de Defensa.
Asimismo también se excluirán de la prohibición los rifles y escopetas de calibre 0.22 que se usan comúnmente para la caza de patos, se explica en un comunicado divulgado por la oficina de Ardern con detalles de la medida propuesta.
La reforma va de la mano de una amnistía para aquellos que entreguen sus armas, así como un plan de recompra por parte de las autoridades, que será anunciado más adelante.
Todas las víctimas identificadas
La Policía, por su parte, informó de que ha culminado la identificación de todas las víctimas del ataque cuya autoría se atribuye al australiano Brenton Tarrant, de 28 años, que disparó con armas semiautomáticas contra los musulmanes que rezaban en las mezquitas Al Noor y Linwood en Christchurch, en la Isla Sur.
"Hemos hecho todo lo que ha estado a nuestro alcance para retornarlos lo más pronto posible y al mismo tiempo asegurarnos de recoger toda la evidencia e información que necesitamos para la acusación criminal", dijo el comisionado de la Policía, Mike Bush, en un comunicado.
Las víctimas mortales incluyen a Mucaad Ibrahim, que con sus tres años es el más joven de todos los fallecidos en el atentado, y Sayyad Milne, un estudiante neozelandés de 14 años quien fue enterrado hoy en el cementerio Memorial Park, en el este de Christchurch.
También se realizaron las exequias de Haji-Daoud Nabi, un afgano de 71 años que migró a Nueva Zelanda en los años setenta y quien salvó algunas vidas durante el ataque armado a la mezquita de Al Noor.
De los 50 heridos en el ataque, todavía siguen hospitalizados 29, de los cuales 9 s e encuentran en estado grave, entre ellos una niña de 4 años que fue trasladada a Auckland, en la Isla Norte.
Nueva Zelanda se prepara para recordar a las víctimas mañana, cuando se cumpla una semana del ataque y las mezquitas de Al Noor y Linwood abrirán sus puertas por vez primera desde la tragedia para la habitual oración de los viernes.
Tarrant, el único sospechoso de la masacre, comparecerá el 5 de abril acusado de un cargo de asesinato ante el Tribunal Superior de Nueva Zelanda, cuyo Gobierno tiene previsto, además de modificar la ley de armas, tomar medidas para evitar la difusión de mensajes de odio en las redes sociales.