El padre del niño que fue rescatado por un joven maliense, Mamoudou Gassama, el sábado cuando estaba colgado de un balcón en París se retrasó al volver a casa porque estaba jugando en su teléfono móvil con la aplicación de Pokémon Go, según ha informado este lunes el fiscal François Molins, que ha confirmado la apertura de un proceso judicial contra este hombre.
El Gobierno ha concedido la nacionalidad al ciudadano maliense, que escaló la fachada de edificio para salvar al niño. El presidente, Emmanuel Macron, ha recibido este lunes en el Elíseo a quien no ha dudado en catalogar como un "héroe".
Molins ha explicado en una entrevista a la cadena BFMTV que el padre, de 37 años, había abandonado el domicilio "para hacer la compra". "El problema es que tardó en regresar, simplemente porque al salir de la tienda se puso a jugar a Pokémon Go", ha revelado el fiscal, que ha explicado que la madre del niño vive en la isla de Reunión junto a parte de la familia.
El padre del niño salvado fue interrogado el domingo por la Fiscalía y deberá comparecer en septiembre ante un tribunal para responder por dejación de sus funciones como progenitor, un delito que es susceptible de ser castigado con hasta dos años de cárcel. Hasta entonces, permanecerá en libertad condicional.