Internacional

Maduro se ofrece para "tender la mano" a las empresas europeas y buscar un "nuevo comienzo"

El reelegido presidente de Venezuela ha pedido una reunión con los directivos de las entidades para mejorar las relaciones e inversiones de los europeos en el país

  • Nicolás Maduro, presidente de Venezuela.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió hoy una reunión con directivos de las empresas europeas que operan en el país caribeño para un "nuevo comienzo" en materia de relaciones e inversiones.

"Yo quiero recibir a uno por uno de los presidentes o de los directivos de las empresas europeas que vengan, y así lo digo para las empresas de Asia, de Rusia, de China, de Bielorrusia, de Irán, de América Latina, del Caribe", dijo el mandatario durante un acto de juramentación como presidente reelegido.

En su discurso, proferido ante la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC) -un foro que no es reconocido por la oposición y varios países- Maduro manifestó su deseo de "escuchar a los sectores empresariales" nacionales e internacionales para "tenderles la mano para un nuevo comienzo".

Informó que el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, sostuvo ayer una reunión "muy cordial" con los embajadores de la Unión Europea (UE) en Venezuela y que estos "le plantearon algunos problemas que tienen las empresas europeas" en el país.

Ante ello, Maduro dijo que ordenó "inmediatamente" al ministro de Economía, Simón Zerpa, y al vicecanciller Yván Gil convocar "a todas las empresas europeas a Venezuela, sus directivos, para una reunión de trabajo".

"Para resolver los problemas que tengan y que traigan nuevas inversiones y si hay alguna deuda la convertimos en inversión de crecimiento", agregó.

Irregularidades en los comicios

La UE denunció el martes las "irregularidades" cometidas en los comicios del domingo, cuando fue reelegido Maduro y en los que no participó el grueso de la oposición venezolana por considerarlos fraudulentos, y advirtió que los Veintiocho "considerarán la adopción de medidas adecuadas" contra el Ejecutivo venezolano.

Caracas repudió esta declaración y, en cambio, esperan que el bloque europeo "mantenga el apego indispensable al Derecho Internacional, al principio de no intervención en los asuntos internos, el respeto a la soberanía y a la libre determinación de los Pueblos".

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