El Rey de Marruecos Mohammed VI ha agradecido mediante una carta dirigida al teniente coronel de la Unidad Militar de Emergencias (UME), Juan Saldaña, la labor de la institución en Marruecos tras los terremotos que azotaron Marrakech y han dejado más de 2.900 muertos.
"Me ha conmovido personalmente, así como a todo el pueblo marroquí la participación activa y eficaz de vuestro equipo de salvamento, al lado de sus hermanos marroquíes que, codo con codo, han desplegado todos sus esfuerzos y medios en las operaciones de búsqueda y rescate, tras el devastador seísmo que asoló la región marroquí de Al Hawz", detalla un comunicado difundido por Defensa.
Mohammed VI ha mostrado así todo su "orgullo y aprecio" por la "generosa participación" de la UME que "encarna la profundidad de los sólidos y fraternales lazos de solidaridad efectiva que unen a los pueblos español y marroquí", expone.
De esta manera, el Rey de Marruecos ha reiterado al finalizar la carta su gratitud personal y la de todo el pueblo marroquí a todos los componentes del equipo español que con "caballerosidad y altruismo han hecho ver la profundidad de los sentimientos de afecto sincero y solidaridad activa que guardan hacia este país, su segunda patria", zanja el comunicado junto con la firma de Mohammed VI.
La labor de la UME en todo el mundo
El trabajo de la Unidad Militar de Emergencias es reconocida a nivel internacional, su colaboración en desastres naturales alrededor del globo ha permitido que su labor considerada en medio mundo. La unidad militar envió un equipo de 56 integrantes y cuatro perros para ayudar en el país vecino prácticamente desde el inicio de la catástrofe. Después de una semana de trabajo, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, informaba este fin de semana que los efectivos de la UME estarán en Marruecos el tiempo que sea "necesario" e "imprescindible".
Entre otras actuaciones, la encomiable ayuda de la unidad española en tragedias como el terremoto de Turquía y Siria, la erupción del volcán de La Palma o la pandemia en España -así como en múltiples incendios forestales-, ha sido crucial para salvar vidas.