La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pronuncia este miércoles su discurso en el debate del Estado de la Unión Europea para dar inicio a un curso marcado por la guerra en Ucrania y la escalada de la inflación, reflejada principalmente en los precios de la energía y los alimentos.
Se trata de un año clave para la presidenta y para el conjunto de Europa, sacudida por una crisis sin precedentes provocada por la pandemia de la covid posterior al Brexit y el estallido de una guerra en suelo europeo que ha zarandeado al continente y al resto del planeta.
La semana más importante para el Parlamento Europeo se ha enmarcado en un contexto en el que el precio del gas y de la electricidad están disparados, la invasión de Ucrania ha arrebatado cualquier atisbo de serenidad que hubiese y, consecuencia de ello, la energía se ha convertido en el bien más preciado.
La guerra de Ucrania ha centrado la mayor parte de la intervención, tras un largo aplauso a la mujer del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, Von der Leyen ha prometido que "Europa va a dar respuesta". "Nunca, hasta ahora, se había debatido en un estado en el que la guerra asola territorio europeo. Todos recordamos aquella mañana fatídica a finales de febrero, cómo los europeos se despertaron consternados, con el rostro del mal y atormentados por el ruido de las sirenas y crueldad de la guerra", ha comenzado la dirigente.
Después de afirmar que "la crisis climática también tiene mucho peso en las facturas" y que, por este motivo, "los estados miembros están presentando medidas para reducir su consumo", Von der Leyen se ha mostrado especialmente férrea con las compañías energéticas. Esta posición varía respecto al pasado año, primero por el hecho de pertenecer a un partido conservador (PPE), que en otra situación no arremetería contra las eléctricas; segundo, porque en 2021 ni siquiera se trató el tema de la energía en el SOTEU.
Tope a los ingresos de las energéticas
"Proponemos un tope a los ingresos de las empresas que producen electricidad a bajo coste porque están acumulando ganancias caídas del cielo, algo que nunca pensaron que obtendrían", ha asegurado para añadir que, en estos momentos, "es erróneo recibir beneficios extraordinarios, gracias a la guerra y a costa de los consumidores". "Con nuestra propuesta se recaudarán más de 140.000 millones", ha afirmado en el ecuador de su mandato de cinco años.
