Bangkok, la capital de Tailandia, ha sido el escenario de una gran explosión después de que una bomba detonara en el centro de la ciudad causando la muerte de al menos 19 personas, entre ellas tres extranjeros, y más de 120 resultaran heridas frente al templo de Erawan, en una de las intersecciones más populares de la ciudad, según informó el comisario general de la Policía tailandesa, el general Somyot Poompanmuang, que rebajó la cifra de fallecidos después de que los medios locales informaran de hasta un total de 27 muertos.
Además, Poompanmuang ha aclarado que la bomba no estaba escondida en una moto, como se había creído inicialmente, sino que fue colocada en el lugar por los autores del atentado. Según el jefe de la Policía, los autores, a los que ha acusado de buscar intencionadamente matar a gente en un lugar muy concurrido, habían colocado tres bombas en la zona, pero solo una de ellas explotó, mientras que las otras dos fueron desactivadas por los artificieros. Entre los fallecidos, no se encuentra ningún ciudadano español, según la lista provisional de víctimas de los hospitales.
De las 19 víctimas mortales, 12 fallecieron en el lugar de los hechos, mientras que el resto han muerto en los hospitales
La policía ha desplegado un centenar de agentes y ha acordonado la zona, muy transitada por encontrarse junto a varios centros comerciales, en una de las áreas más bulliciosas de la capital tailandesa. Una hora después de la explosión en el lugar se podían ver en el suelo manchas de sangre y cristales rotos. Por el momento ningún grupo ha reivindicado la autoría del atentado, que se ha producido en una zona muy frecuentada por turistas del este de Asia principalmente. Los atentados terroristas no son frecuentes en Bangkok, aunque grupos armados musulmanes están implantados en el sur de Tailandia pero no suelen operar en la capital del país.
Al parecer, de las 19 víctimas mortales, siete fallecieron en el lugar de los hechos, mientras que el resto han muerto en los hospitales a los que han sido trasladadas. Según los medios locales, habría al menos dos ciudadanos chinos y uno filipino entre los fallecidos. Además, según el centro de emergencias de la zona en la que han tenido lugar los hechos, 81 personas han resultado heridas y han tenido que ser atendidas en hasta 14 hospitales de Bangkok. Se cree que la mayoría de los heridos son turistas de origen asiático. La Embajada china ha confirmado ya la muerte de dos chinos. La bomba había sido colocada en el interior del templo de Erawan, muy frecuentado tanto por locales como por turistas del este asiático, y estaba compuesta por unos tres kilos de TNT.
La Policía desactiva otras dos bombas
Tras el atentado, la Policía tailandesa organizó la búsqueda de otros artefactos por el miedo a nuevas explosiones. Al final, los artificieros encontraron y desactivaron otras dos bombas, que no estallaron junto a la primera. "Estamos buscando otras dos o tres bombas ya que hemos encontrado un objeto sospechoso", explicaba a Reuters el jefe de la Policía Nacional, Prawut Thawornsiri, poco después del atentado. "Podría haber otra explosión, así que hemos bloqueado la escena del crimen y estamos pidiendo a los viandantes que se alejen", añadió.
Los medios locales hablan de al menos tres extranjeros heridos
La bomba ha estallado junto al templo religioso de Erawan, en un importante cruce de la capital tailandesa frecuentado por turistas, especialmente del este asiático, pero también por residentes locales. La zona alberga también hoteles, centros comerciales y oficinas. Ningún grupo se ha atribuido de forma inmediata la responsabilidad de este atentado. Las fuerzas tailandesas combaten con insurgentes musulmanes en la zona sur del país, pero estos rebeldes no suelen extender sus acciones fuera del bastión de la etnia malaya. El país también se ha visto sacudido en los últimos años por intensas rivalidades políticas que desencadenaron, en mayo de 2014, en un golpe de Estado militar.
