El Pressing catch podría definirse casi como una telenovela masculina, con buenos muy buenos y malos muy malos, y en la que fornidos luchadores (y a veces sus parejas) se enfrentan unos a otros por motivos variados: traiciones de amistad, líos de faldas, problemas familiares… Un auténtico culebrón que hace las delicias de la audiencia, con mamporros en el ring de por medio. Un fenómeno que lleva años causando sensación en todo el mundo, incluida España, país que han visitado sus superestrellas en diferentes giras.
Los porrazos de los luchadores son reales, ya que las peleas no son ensayadas.
Este show deportivo del pressing siempre tiene la coletilla de ser ‘de mentira’, algo que no deja de ser ni cierto ni falso. Las peleas están pactadas y se sabe de antemano quién gana cada combate, ya que todo obedece a un guion en el que las victorias y derrotas permiten abrir nuevas líneas argumentales. Sin embargo, los porrazos de los luchadores son reales, ya que las peleas no son ensayadas. Los atletas tienen que colaborar los unos con los otros para dañarse lo menos posible, y por ello se hacen pequeños gestos sobre qué zonas van a golpear al adversario o qué llave le van a ejecutar, para que a éste no le pille de sorpresa y se ahorre así una posible lesión.
La cara oscura: muerte, racismo, homofobia…
Sin embargo, el pressing catch tiene una cara oscura que a diferencia de lo anterior sí que es real: deportistas que mueren prematuramente, drogas, alcohol, racismo, homofobia… Sin ir más lejos, la pasada semana fallecía Sean O’Haire, luchador que fue hallado sin vida en su domicilio de Carolina del Sur; a sus 43 años, había decidido suicidarse, sumándose así a un listado de más de 200 estrellas que no han llegado a la edad de jubilación por los más diversos motivos.
El ‘Último Guerrero’ murió en abril en extrañas circunstancias.
Aunque Sean no era muy popular en España, lo cierto es que las muertes trágicas del ‘Pressing catch’ poco entienden de fama. Algunos de los luchadores más exitosos en nuestro país tampoco tuvieron un final feliz. Macho Man Randy Savage murió a los 58 años de un ataque al corazón, y la que fuese su mánager, Miss Elisabeth, falleció de sobredosis a los 42. El Último Guerrero moría el pasado abril de 2014 a los 54 años en extrañas circunstancias, y antes que él, André el Gigante, que visitó Barcelona en una gira del Pressing Catch en 1992, falleció a los 46 por insuficiencia cardiaca.
Asesinatos y cocaína
Sin duda, una de las historias más trágicas en lo que a decesos se refiere en wrestlers sucedió en el año 2008. El canadiense Chris Benoit (que poco antes había estado en Madrid y Barcelona luchando dentro de otra gira), mató a su esposa y a sus hijos y luego se quitó la vida. No menos aciaga es la muerte de Owen Hart, que falleció delante del público tras una mala entrada en el cuadrilátero, la cual realizaba volando. Terremoto Earthquake, El Cariñoso Ricky Rude, Hércules, el japonés Yokozuna, ‘El poli Loco’… La lista de muertes prematuras en este espectáculo es enorme. Otro ejemplo sería Mister Perfect, el cual tuvo tal tirón en España que incluso fue parodiado incluso por Martes y Trece en uno de sus especiales de fin de año. Este deportista de característica rubia y larga cabellera falleció a los 44 por sobredosis de cocaína.
Bam Bam Bigelow, Umaga o Eddie Guerrero perecieron por sobredosis.
Las adicciones a las drogas, los tranquilizantes y el alcohol han hecho mucho daño a este entretenimiento de peleas. Otros muertos prematuros como Bam Bam Bigelow, Umaga, Brian Adams ‘Crush’, el ‘British Bulldog’ o Eddie Guerrero perecieron por sobredosis, o porque sus organismos dijo basta tras una alargada época de excesos en las que las rehabilitaciones y recaídas fueron una constante. Mejor suerte corrió el ya retirado Jake Snake Roberts ‘El Serpiente’, que sigue vivo pero que lleva años luchando por superar su dependencia de los estupefacientes y la bebida.
¿Qué hay de Hulk Hogan?
Aunque es un mito viviente, y de hecho, de vez en cuando se deja ver aún en el programa de Neox, lo cierto es que la vida de Hulk Hogan no ha estado exenta de polémica. En los últimos años, el fallecido Último Guerrero acusó a Hulk de consumir cocaína con otros luchadores, así de como tener una escandalosa vida sexual con orgías con su esposa y otros luchadores, e incluso fiestas sexuales con menores de edad. Es más, la ex esposa de Hulk apuntó que éste tuvo una relación homosexual junto a Brutus el Barbero, el que fuese su amigo fiel en el ring.
Hace años, Chris Kanyon confesó que lo había pasado mal por ser homosexual.
Y es que también hay cierta homofobia en el pressing, aunque parece que la cosa está cambiando en la actualidad. En 2013 se conoció al primer luchador abiertamente homosexual, Darren Young. El público reaccionó bien y ha continuado una exitosa trayectoria que ya apuntaba maneras. Mas no muchos años antes otro atleta, Chris Kanyon, confesó en sus memorias lo mal que lo había pasado por ser homosexual dedicándose a la lucha libre. Por desgracia, Kanyon, que sufría trastorno bipolar, no acabaría teniendo una vida feliz. En 2010 se suicidaría con alcohol y antidepresivos. Tenía 40 años.
No hay campeones negros
Al pressing catch se le ha acusado también de racismo. No ha habido un hecho directo de faltar el respeto a nadie por el color de su piel, pero muchos colectivos de ciudadanos negros han criticado que la empresa que dirige el espectáculo, la WWE, nunca ha elegido un campeón mundial negro en sus 62 años de historia (aunque sí en categorías inferiores).
Hay un personaje especializado en luchar contra rivales negros y ganarles siempre.
Además, se critica también que los luchadores negros suelen responder a estereotipos raciales, y en el mejor de los casos, se trata de wrestlers que no tienen siquiera un personaje asignado. Sencillamente, salen al ring sin gran ostentación, dispuestos a dejarse ganar, tal como mandan los jefes; incluso, hay deportistas como Rusev, cuyo rol es el de un atleta proruso y antiestadounidense, que se ha especializado en luchar contra negros y ganarles siempre. La WWE afirma estar trabajando en este sentido, pues no quieren que se transmita de que si eres negro jamás será un campeón, tal como se le está acusando de hacer.
Casualmente, el citado Rusev será uno de los luchadores que vendrán a Madrid el próximo mes de noviembre, cuando el Palacio de Vistalegre acoja uno de estos shows de ‘Pressing catch’ en una nueva gira europea de la WWE. Junto a él se podrá ver a John Cena, Keane o Sheamus ‘El Guerrero Celta’, entre otras estrellas. Porque el catch sigue tiendo tirón en España, y mucho.