Atresmedia ha cerrado recientemente uno de los últimos capítulos del proceso de absorción de La Sexta. El grupo presidido por José Creuheras ha entregado 789.738 acciones, valoradas aproximadamente en 7,5 millones de euros, a Gala Desarrollos Comerciales, fondo de confianza de algunas grandes fortunas que está liderado por Jaime Bergel. Lo ha hecho para cumplir uno de los compromisos que adquirió con los otrora dueños del canal cuando acordó su compra, dentro de una operación de 'earn-out'.
Para encontrar la raíz de esta operación hay que remontarse a 2012, cuando la compañía entonces encabezada por José Manuel Lara Bosch decidió absorber La Sexta, cadena surgida durante el 'zapaterismo' que contaba entre sus socios con algunos de los empresarios audiovisuales más cercanos a Moncloa por aquel entonces, como José Miguel Contreras o Jaume Roures.
Entre los compromisos que adquirió la compañía de Planeta con la contraparte de esta operación se encontraba el de entregarle el 7% de las acciones de Atresmedia. Este porcentaje podría aumentar hasta aproximadamente el 14% en 2016 si el grupo cumplía con una serie de objetivos económicos en los siguientes ejercicios. Así ha sido. De ahí que Gala Desarrollos Comerciales haya percibido ese paquete accionarial, según explican fuentes del holding de medios de comunicación.
La temprana marcha de Roures
El resto de los socios fundadores de La Sexta recibieron las acciones que les correspondían en 2014, a petición propia y con dos años de antelación. En concreto, se les entregaron 8,37 millones de títulos, equivalentes al 3,7% del capital. Es decir, aproximadamente la mitad de las que les correspondían en virtud el acuerdo al que se llegó para la fusión con Antena 3, lo que supuso un ahorro para Atresmedia de 90 millones de euros.
Estos accionistas estaban agrupados en el denominado Grupo Audiovisual de Medios de Producción (GAMP), del que formaban parte Imagina (Globomedia y Mediapro), BBK, El Terrat (Andreu Buenafuente) y Bainet (Carlos Arguiñano) y que, de facto, controlaba el día a día del canal.
Con este movimiento renunciaron a un paquete de títulos que actualmente estaría valorado en decenas de millones de euros. Pero, entonces, algunos de sus componentes, como Mediapro, se encontraban inmersos en serias dificultades económicas. De hecho, la empresa de Jaume Roures esperaba la resolución de un litigio contra Prisa por sus diferencias en la explotación de los derechos del fútbol en el que estaban en juego más de 300 millones de euros.
Roures y sus socios exigieron este paquete accionarial en 2014, con dos años de antelación. Eso permitió a Atresmedia aplicar una quita equivalente a 90 millones de euros
El único socio de La Sexta que ha percibido el 'bonus' en su totalidad es Gala. Lo ha hecho gracias al buen rumbo de un grupo que durante los nueve primeros meses del año consiguió un beneficio neto de 101,5 millones de euros, es decir, el 46% superior al que logró en el mismo periodo de 2015.
Dentro de la TDT, ocupa una posición privilegiada: es el segundo grupo en audiencia (27%) por detrás de Mediaset y el primero en ingresos publicitarios, según Infoadex. De cada diez euros que los anunciantes invierten en el sector, 4,2 van a parar a las arcas de esta compañía.
El único socio fundador de La Sexta que se mantiene en su Consejo de Administración es Imagina, que cuenta con el 4,2% de las acciones. Este órgano sigue estando controlado por los hombres de Planeta, una compañía que dispone del 41% de los títulos. El grupo alemán Bertelsmann atesora el 19,1%, según datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
