Un balance cuando menos cuestionable. Hace justo un año los directivos de Prisa, encabezados por su presidente, Juan Luis Cebrián, acometieron un expediente de regulación de empleo (ERE) en El País. Hasta 130 empleados fueron despedidos. En aquel momento, las razones de la medida eran que había que superar "la grave caída de ingresos" porque el rotativo no podía "soportar por más tiempo su estructura de costes". Doce meses después, los números del rotativo no han cambiado demasiado. De hecho, según las cuentas enviadas por el holding de medios a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el periódico se ha dejado en este tiempo 40.000 lectores y un 13% ingresos (20 millones de euros). Además, las principales cifras son iguales o sensiblemente peores que antes de los despidos.
Los datos hablan por sí solos. Prisa envió la pasada semana a la CNMV el informe de sus cuentas durante los primeros nueve meses del año. Según consta en esa documentación, El País ha obtenido en estos tres trimestres de 2013 unos ingresos de explotación de 136,46 millones de euros, frente a los 156,8 del mismo período de 2012. Es decir, ha dejado de ganar por este concepto 20 millones, lo que supone un descenso del 13%. En cuanto a lo ingresado gracias a la publicidad, en los nueve primeros meses del año El País ha logrado 53,51 millones, por los 61,25 de 2012. Un descenso del 12,6%. En los gastos ocurre algo similar, puesto que la cabecera ha gastado hasta septiembre 139,96 millones frente a los 162,23 de 2012, de forma que el descenso es del 13,7%.
Así las cosas, el rotativo logra un beneficio bruto de explotación (EBITDA) del 2,82 millones de euros, frente a los 3,01 del mismo período de 2012. Así, el EBITDA ha caído un 6,2%. Y el resultado neto de explotación (EBIT) se queda en 3,50 millones en lo que va de 2013, por los 5,43 de 2012, con lo que la variación es del 35,7%. Cifras que no invitan al optimismo. A los datos puramente económicos hay que sumar la caída en ventas. En los nueve primeros meses de 2013 El País ha bajado sus ventas en un 11,4%. Esto, en número de lectores, quiere decir que el rotativo tenía 296.065 en septiembre 2013 por los 334.132 de septiembre de 2012. O sea, tras el ERE que costó el puesto a 130 empleados, el diario generalista ha perdido más de 38.000 lectores.
Versión de la empresa
Teniendo en cuenta estos datos, no es extraño que en su comunicado Prisa no destacase especialmente los resultados de su periódico generalista. Tan solo en un apartado dedicado genéricamente a "prensa" -donde se incluyen las cuentas de Cinco Días, As y sus revistas-, la compañía aseguraba que "los ingresos (200,1 millones de euros), caen un 16,4% comparado con los primeros nueve meses de 2012". Algo que explican "tanto por la debilidad de publicidad (-12,6%) que ha mostrado una importante mejoría en el tercer trimestre estanco (+6,2% comparado con -16,3% del segundo y -20,8% del primer trimestre del año), como por la caída de la circulación (-16,6%)". "El EBITDA ajustado asciende a 12,6 millones de euros (+8,4%)", apostillaba la empresa.
Aparte de la unidad de negocio de prensa, los datos generales del Grupo Prisa son demoledores. Como ya informó Vozpópuli, las pérdidas del holding en los nueve primeros meses del año ascienden hasta los 194,8 millones de euros. Ahora mismo, la compañía presidida por Cebrián tiene una deuda neta de 3.241 millones. Ante esto, Prisa ha convocado una Junta General de Accionistas para el próximo 10 de diciembre por la mañana. Las previsiones de la empresa son aprobar antes de esa fecha el plan de refinanciación vital para el futuro del conglomerado de medios. Un plan que consiste básicamente en que los grandes bancos y dieciséis fondos buitre salvarán, por el momento, a Cebrián y los suyos.
