Con los resultados de las elecciones generales de la mano, las principales cabeceras generalistas españolas han coincidido en afirmar que nada ni nadie debe impedir que Mariano Rajoy habite otros cuatro años en el Palacio de la Moncloa. La remontada experimentada por el PP en los comicios del 26J y la debilidad de las fuerzas de izquierda les lleva a concluir que debe ser el partido conservador el responsable de formar Gobierno y de buscar pactos que devuelvan la estabilidad a un país que ha vivido durante los últimos meses sumido en una inquietante "incertidumbre".
Mención especial merece el editorial del diario El País, histórico aliado del PSOE que en los últimos años ha protagonizado diversos virajes ideológicos, influido, entre otras cosas, por los intereses de sus inversores y accionistas institucionales. En su editorial de este lunes, incide en que, pese a la "precaria victoria" obtenida por el PP, debe ser este partido quien controle el Ejecutivo durante la próxima legislatura. "La prioridad absoluta es la de hacer posible un pacto (...), corrigiendo así la peor consecuencia de la legislatura precedente (...). El resultado del PP, claramente mejor que el de diciembre, le concede de nuevo la iniciativa para intentar formar Gobierno; esperemos que no lo rechace de nuevo", expone.
'El Mundo' define a Pablo Iglesias como una víctima de su arrogancia y de los dejes de la "vieja política" que ha asumido
El artículo también alude al PSOE, un partido al que pide que contenga el entusiasmo por haber evitado el sorpasso de Podemos, pues, al igual que en diciembre, ha vuelto a perforar su suelo electoral. "Se trata de un partido tan tocado que hasta un pésimo resultado es susceptible de convertirse en una buena noticia (...). Cuando concluya en Ferraz el suspiro por haberse librado del final por muerte súbita, tal vez se comprenderá que todos los problemas que el partido tiene siguen así", relata, tan sólo unas líneas antes de apelar a su generosidad -y a la del resto de las formaciones- para evitar un nuevo bloqueo institucional.
A esa dadivosidad también hace un llamamiento El Mundo, que defiende que el próximo gobierno debería estar presidido por el gran vencedor de estos comicios: Mariano Rajoy. El rotativo de Unidad Editorial califica a Albert Rivera como uno de los "derrotados" de la jornada, a Pablo Iglesias como una víctima de su "arrogancia" y de los dejes de la "vieja guardia" que ha adoptado; y al PSOE como un partido en horas bajas con un líder debilitado al que acechan sus barones territoriales.
'ABC' se felicita por el resultado
La cabecera generalista de Vocento deja claro en su editorial que los electores han apoyado mayoritariamente la opción ideológica que ha defendido en sus páginas. "Desde ABC saludamos con legítima satisfacción el ver que nuestra posición editorial ante el voto ha sintonizado con la de la sociedad. La ciudadanía ha optado por dar la victoria al partido que defiende con más solvencia a España", concreta.
Su director, Bieito Rubido, asevera en una tribuna de opinión en que este lunes comienza una nueva etapa en España en la que Rajoy deberá encabezar un Ejecutivo que se verá obligado a realizar un "recorte multimillonario" próximo a los 10.000 millones de euros, a revisar Pacto de Toledo y a buscar alianzas con la oposición para sacar adelante las reformas que demanda la sociedad. En el texto, lanza un mensaje a Ciudadanos, un partido al que llama a reflexionar sobre las causas de su pérdida de sufragios y a trazar una estrategia eficiente, derivada de un mejor conocimiento del perfil de su votante.
"Unas nuevas elecciones serían un desaire inmerecido, irresponsable e injusto de los partidos a los electores", concluye 'La Vanguardia'
Mucho más entusiasmada con los resultados del Partido Popular se muestra La Razón, que define como "inapelable" el triunfo de Rajoy. El diario opina que los electores han optado por la estabilidad frente al aventurismo político; e insta a negociar a los líderes que anteponen la estabilidad de España a sus intereses particulares. "Los españoles se lo exigen y su obligación es responder de inmediato a esta expectativa", sostiene.
La Vanguardia, alejada desde hace varios meses de las posturas catalanistas con las que coqueteó mientras Artur Mas estuvo al mando de la Generalitat de Cataluña, apela a alcanzar un acuerdo urgente para paliar la inquietud que ha brotado en España en los últimos meses como consecuencia de su desgobierno.
"Unas hipotéticas terceras elecciones, que podrían ser convocadas, llegado el caso, antes de fin de año, no sólo serían una nueva -e innecesaria- prueba de la incapacidad pactista de los partidos. Serían también un desaire inmerecido, irresponsable e injusto de los partidos a los electores", concluye.
