Los responsables de El País han anunciado una auténtica revolución en la sección de política del diario que implicará el cambio de posición de prácticamente todos sus periodistas. El movimiento que más recelos ha causado en la redacción es el de un 'peso pesado' como Fernando Garea, hasta ahora encargado de la información parlamentaria y que pasará a formar parte del departamento de reportajes, de una mucho menor importancia en el rotativo.
Anabel Díez, que durante los últimos años ha seguido la actualidad del PSOE, firmará a partir de ahora las noticias relacionadas con el Gobierno, mientras que Juan José Mateo -que hasta el momento escribía de Ciudadanos- ejercerá de cronista del Partido Popular. Javier Casqueiro, que se ocupaba de esta tarea, asumirá la información de Asuntos Exteriores, como un "corresponsal diplomático", han explicado a Vozpópuli fuentes de la redacción.
Oficialmente, un portavoz de Prisa noticias ha rechazado hacer comentarios al respecto de estos movimientos.
No hay que olvidar que Casqueiro se hizo cargo de la información relacionada con Moncloa y Génova en 2015, pocos meses después de que se completara la refinanciación de la deuda del Grupo Prisa, en la que se atribuye un importante papel mediador a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría. Este periodista sustituyó en este puesto a Carlos E. Cué (enviado a Argentina), a quien en la redacción se consideraba “bastante más beligerante” con el Ejecutivo que su sucesor. De ahí que la decisión de la cúpula de El País levantara suspicacias entre sus compañeros.
En lo que respecta a la información del PSOE, los responsables de su cobertura serán a partir de ahora Elsa García de Blas -que hacía Podemos- y Jordi Pérez Colomé. Por su parte, José Marcos dejará de escribir sobre la formación liderada por Pedro Sánchez para contar todo lo relacionado con el partido Morado. Una posición complicada si se tiene en cuenta que las relaciones entre el Grupo Prisa y Pablo Iglesias y los suyos han sido tradicionalmente muy tensas.
Miguel González se mantendrá como especialista en el Ministerio de Defensa, mientras que Miquel Arberola -hasta ahora encargado de Casa Real- e Íñigo Domínguez ejercerán de cronistas parlamentarios.
Fuentes de la redacción han incidido en que los cambios de roles de sus periodistas han sido habituales a lo largo de la historia del diario, aunque "pocas veces han afectado a tantas personas a la vez". Especial extrañeza ha ocasionado entre sus efectivos la sustitución de Fernando Garea como cronista parlamentario. "Los motivos de esta sustitución no han trascendido, aunque es obvio que su firma perderá peso, puesto que (la sección de) reportajes tiene una importancia mucho menor", afirman.