Victoria de relevancia del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno en los procesos contenciosos que está teniendo contra instituciones y empresas públicas. El tribunal contencioso-administrativo número 6 de Madrid ha aceptado el recurso del Consejo -creado a raíz de la ley de transparencia de 2013- por el cual se reclama a RTVE que "aporte en 15 días hábiles al interesado la información solicitada".
El interesado es el abogado murciano especializado en transparencia Samuel Parra, y la información interesada es relativa al concurso de Eurovisión 2015. Parra quería saber cuánto había costado el concurso completo a RTVE, en el que la cantante madrileña Edurne representó al país en el certamen celebrado en Viena. Concretamente pedía, según recoge la sentencia, "todas las partidas en viajes, alojamientos, dietas, vestuario, gastos de delegaciones y acompañantes. Se solicita, por tanto, el coste total de que España haya participado en el festival de Eurovisión 2015, con detalles concretos de los de los gastos".
TVE rechazó dar esta información, como también rechazó facilitar otros datos tales como cuánto habían cobrado Ramón García y Anne Igartiburu por presentar las campanadas de Nochevieja. En este caso, alegaba perjuicio económico. En otros, como el de los presentadores vascos, colisión con la ley Orgánica de Protección de Datos.
Todas estas solicitudes de información fueron denegadas por TVE a pesar del informe favorable del Consejo, que los llevó a los tribunales dado que la función de esta nueva institución es velar por la mayor transparencia e información pública posible. Ahora, un tribunal da la razón al organismo de transparencia, aunque ante esta sentencia cabe recurso de apelación.
TVE alegaba perjuicio
TVE alegaba perjuicio económico en caso de que facilitara información. Pero el tribunal considera que "el perjuicio que se alega no ha resultado acreditado, pues proporcionar la información requerida sobre el coste de la participación en Eurovisión no se evidencia que perjudique los intereses económicos ni comerciales de RTVE, pues lo único que se reclama es el coste total de que España haya participado en el festival de Eurovisión 2015; y cumplir con lo solicitado no permite constatar que se derive ni un perjuicio para la recurrente ni una ventaja competitiva para otros medios televisivos, ni menos aún para el servicio público que la recurrente presta".
