La Región de Murcia terminará en los próximos meses con la sangría que implica una televisión autonómica, pero pondrá en marcha un modelo que seguirá costando millones de euros a los murcianos y que supone subvencionar un negocio privado para que tenga vocación pública. El coste que tendrá para las arcas regionales el renovado servicio audiovisual será de 15 millones de euros al año. No se pagará ni un euro más, según confirman fuentes del Gobierno que preside el popular Ramón Luis Valcarcel y que explican que el presupuesto llegará a modo de subvención para evitar pagar los 3 millones de euros extra que supondría de IVA.
"El gobierno murciano había ensayado un modelo mixto en la gestión, en el que la iniciativa privada tenía más peso que la pública, pero a la vista de los acontecimientos, tenemos que apostar por una gestión privada con vocación de televisión pública", aseguró este martes Valcarcel en Punto Radio para justificar el cierre de 7RM y el anuncio de que pondrá en marcha una televisión privada regional. El presidente murciano aseguró durante la entrevista que se están preparando los pliegos de condiciones para convocar concurso público. Fuentes de la consejería de Economía y Hacienda del Gobierno de Murcia confirman que el pliego de condiciones está en elaboración y que la previsión es que la aportación de la comunidad autónoma de Murcia sea a modo de subvención por lo que no incluirá el Impuesto sobre el Valor Añadido.
La nueva televisión, no obstante, pasará de suponer a las arcas públicas unos 46 M€ de media anual a 15 M€, una rebaja que con IVA incluido es un presupuesto más que suficiente para desarrollar un proyecto audiovisual regional en opinión del Ejecutivo de Murcia. El modelo base de la nueva televisión regional es el de la comunidad autónoma de Castilla y León (también gobernada por el Partido Popular), la cual cuenta desde 2009 con este servicio audiovisual (RTVCyL) gracias a un contrato programa de 25 millones de euros a una UTE conformada por dos constructores. La diferencia radica que mientras Castilla y León aporta el dinero como contrato de servicios Murcia lo hará como subvención. El objetivo es evitar el pago del IVA que la Agencia Tributaria sí reclama a RTVCyL.
Impagos con Hacienda
El canal autonómico privado castellano y leonés, participado al 50 por ciento por Promecal Audiovisuales (Méndez Pozo) y Edigrup Producciones (Ulibarri), ha recibido entre 2009 y lo que va de 2012 en torno a 90 millones de euros de la Junta de Castilla y León para el cumplimiento de la adjudicación de la licencia regional para la explotación de dos canales de TDT. Sus gestores consideran que la aportación pública regional es una subvención, mientras que Hacienda estima que se trata de una prestación de servicios, hecho que provocó que la Agencia Tributaria reclamase en torno a 10 millones de euros por impago de IVA poniendo en un brete la viabilidad del proyecto.
El cambio de modelo en Murcia, aunque conllevará un ahorro futuro, puede salir caro a Valcarcel en un primer momento ya que ha rescindido de manera unilateral el contrato con la actual explotadora de la concesión la empresa GTM, la cual emplea a 264 trabajadores y realiza dicha labor desde 2006. Al parecer, ante una eventual indemnización al concesionario no se fijó en el contrato por lo que se desconoce si deberá bonificar a la compañía. No obstante la Región de Murcia adeuda unos 20 millones de euros correspondientes al contrato que les permite explotar la televisión autonómica de este año, ya que durante 8 meses se ha realizado la emisión.
