El Tribunal Supremo ha exigido a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que rectifique y anule una sanción de 3,6 millones de euros que impuso en 2011 a Mediaset por vulnerar las restricciones que se le impusieron tras la fusión de Telecinco y Cuatro para que no abusara de su posición dominante en el mercado. Esta multa recayó sobre la compañía dirigida por Paolo Vasile por no presentar a tiempo un plan que detallara la forma de la que iba a cumplir los compromisos que adquirió con la CNMC para que avalara la integración de Cuatro en su estructura, pero el Alto Tribunal la considera desproporcionada, de ahí que haya ordenado su retirada.
Mediaset recibió esta sanción después de que no presentara ante Competencia en tiempo y forma un esquema con las actuaciones que pensaba efectuar para satisfacer los compromisos que había adquirido con el regulador para que diera su visto bueno a la compra de Cuatro. Al establecer estas líneas rojas, se pretendía evitar que la empresa resultante utilizara la fuerza que había adquirido en el mercado de la televisión en abierto para perjudicar a sus competidores. En el momento en que culminó esta operación, Antena 3 y La Sexta aún no se habían unido.
La sentencia del Alto Tribunal expone que la CNMC no respetó el principio de proporcionalidad a la hora de imponer una sanción sobre este asunto, de ahí que la haya invalidado. El fallo incide en que si el regulador decide volver a pronuciarse sobre este hecho y lo hiciera en contra de Mediaset, deberá tener en cuenta que el posible castigo económico que aplique no podrá ser superior a 1,8 millones de euros.
El Tribunal Supremo ha anulado en los últimos meses diversas multas impuestas por la CNMC
Con esta decisión, esta instancia judicial vuelve a tumbar un dictamen de la CNMC, un hecho que se ha convertido en habitual durante los últimos meses y que ha puesto en cuestión la legitimidad de este organismo. El pasado marzo, el Tribunal Supremo se pronunció en contra del sistema de imposición de multas que ha aplicado desde 2009, lo que le obligó a revistar hasta una treintena de multas a empresas de varios sectores. En los últimos tiempos, el súper-regulador también se ha visto forzado a retirar castigos que había impuesto a empresas como Telefónica, Correos, Transmediterránea y Audiovisual Sport, entre otras.
Competencia ha sancionado a Mediaset en tres ocasiones por abusar de la posición dominante en el mercado que adquirió tras comprar Cuatro a Prisa en 2009. La primera es la que ha anulado el Tribunal Supremo y ascendió a 3,6 millones de euros, mientras que la segunda es de febrero de 2013 y su importe fue de 15 millones. La tercera se anunció el pasado 18 de septiembre, se fijó en 3 millones de euros y se debió a la falta de cumplimiento por parte de Mediaset de las limitaciones que tiene para vender publicidad de Telecinco y Cuatro de forma conjunta.
A estos castigos se suman las varias decenas que le ha impuesto por incumplir algún punto de la normativa vigente en sus canales. Sólo en lo que va de año, Mediaset ha pagado 1,7 millones de euros por los 8 expedientes sancionadores que le han afectado. La mayor parte de los mismos se abrieron después de que la compañía se saltarse las reglas establecidas sobre la emisión de publicidad.
