El finiquito de Rosa Benito de Telecinco ha pillado por sorpresa a todo el mundo. Un día la colaboradora estaba sentada en su puesto de trabajo comentando la actualidad y celebrando las bodas de plata de su compañera Lydia Lozano y al siguiente recogía sus cosas camino a engrosar la lista del paro.
La cadena decidía no renovar el contrato de la colaboradora después de que su hija Chayo interpusiera una demanda a una productora por haber hablado de ella. Lo que viene siendo morder la mano que te da de comer, o al menos, que da de comer a tus padres. Poco esperaba la Benito que sería ella la peor parada de todo el asunto.
Ante este nuevo y oscuro horizonte profesional, los Mohedano han tenido que reaccionar con rapidez. Amador, patriarca del clan y, se supone, exmarido de Rosa -pese a que cada día parecen estar más juntos-, también veía cómo su colaboración con Mujeres y hombres y viceversa se quedaba en un paréntesis por las mismas causas. Pero dicho y hecho.
El manager y asesor del amor se atrevía el pasado miércoles a sacar toda la artillería pesada y a comenzar unas memorias por entregas en la revista Semana. Con la excusa de contar toda la verdad sobre su relación con Rocío Jurado y los años que pasó siendo su sombra, Amador aprovechaba el primer capítulo de su relato para cargar contra su sobrina Rocío Carrasco y su marido, Fidel Albiac. “Me he sentido traicionado por mi sobrina”, se sinceraba Amador. Afilen los cuchillos que la presa está servida.
A lo largo de seis páginas, Amador desgrana poco a poco varios episodios de su vida junto a Rocío Jurado y de cómo la hija de ésta y su yerno intentaron ningunearle en diversas ocasiones. Cuenta el representante que Fidel arregló el último concierto que ofreció la cantante sin contarle nada, hasta el punto que la propia Rocío se hincó de rodillas al suelo para pedirle que no la abandonara. Asegura que de todo eso no ganó nada y que prefirió no remover el asunto por la delicada salud de su hermano.
Amador arremete contra su sobrina por querer dejar al margen de un proyecto a Ortega Cano.
También arremete contra su sobrina por querer excluir a Ortega Cano de una supuesta serie que Gracia Querejeta iba a dirigir sobre Rocío Jurado y cómo ésta acabó hablando con otra persona para hacer la serie y dejándole de lado. Y, cómo no, el Museo de Chipiona, la eterna obra que nunca termina de ver la luz y por la que Amador dejó de hablar definitivamente con Rocío Carrasco. Todo, como ven, muy familiar, con mucha paz y muy en homenaje a Rocío Jurado.
Amador sabe que su sobrina no entrará en polémicas, como lleva haciendo desde hace años. La única manifestación hasta el momento ha sido a través de Terelu Campos, íntima amiga suya, que ha asegurado que Rocío Carrasco está ya acostumbrada a todo esto. ¿Estará calentando el ambiente Amador para recibir, de nuevo, la mano amiga de Mediaset? ¿Espera sentarse en un Deluxe para contarlo todo de viva voz y así recuperar lo que ha dejado de ganar en estas semanas? No es una idea descabellada, contando, sobre todo, que una polémica vende y más si nos remontamos en el tiempo -Conchita ya está poniendo a punto el polígrafo para demostrarlo todo-. Peor lo tiene su exmujer, Rosa Benito.
La peor parada
La colaboradora se enfrenta a un montante importante de deudas con un único trabajo en la manga: una serie de conciertos junto a su hija Chayo Mohedano. Y no es que el show no pueda tener cabida en fiestas y teatros, pero es que su público es tremendamente limitado -y más si Rosa deja de salir en televisión- y lo que se gana en un plató de televisión, no se gana en el escenario. ¿Podrá hacer frente a los pagos con cuatro actuaciones por España? Ella, que ganó Supervivientes, que consiguió llenar horas y horas de Sálvame, que prácticamente le quitó el título de 'princesa del pueblo' a Belén Esteban -con la que, casualmente, ya no tiene una gran amistad-, viendo cómo su momento ya no brilla como antes. Eso sí, en un gesto muy de la familia Jurado, de 'aquí no ha pasado nada', Rosa se ha pronunciado en Twitter asegurando que está muy bien, “bien de verdad”. ¿Indirectas a Mediaset? Esto a Vasile no le va a gustar.
Los Mohedano están como vaca sin cencerro. Chayo, responsable de la salida fulminante de sus padres, está dispuesta a negociar con Telecinco. “Si ellos me llaman y hablamos, a lo mejor nos podemos entender”, ha dicho por boca de su padre. ¿Se está haciendo la interesante? ¿Está imitando la táctica de Tsipras con el Eurogrupo? ¿Va a convocar un referéndum entre los Jurado para ver si aceptan las condiciones de Mediaset? No hay quien les entienda. Otros han intentado marcarse un tanto y han acabado desapareciendo para siempre. Deberían tenerlo en mente. Aunque, claro, hay mucho Sálvame que rellenar y muy pocos temas en el ambiente. Eso será su suerte... y nuestra desgracia.