Letizia Ortiz nació en Oviedo el 15 de septiembre de 1972 y es la mayor de dos hermanas, Telma y la fallecida Érika. Siempre fue una niña despierta y locuaz, sobre la que dicen que ya se veía venir que llegaría lejos. Estudió en el colegio público La Gesta de Oviedo y a los 14 años se trasladó con sus padres a Madrid, donde la matricularon en el Instituto Ramiro de Maeztu.
La asturiana es de esas mujeres con gran personalidad y que dejan huella, su propio nombre ya es peculiar y marca la diferencia frente al resto debido al error del funcionario encargado de escribir su nombre en el registro civil y hacerlo en italiano.
Después se Licenció en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, una profesión que le viene de familia ya que su padre, Jesús Ortiz, fundó Antena 3 Radio en Asturias y su abuela, Menchu Álvarez del Valle, también se dedicaba al mundo de la radio.
Al acabar la carrera, Letizia hizo un máster en Periodismo Audiovisual, continuó sus estudios de doctorado en México en 1995 y trabajó en el periódico ‘Siglo 21’, hoy llamado 'Público', como reportera del suplemento ‘Tentaciones’. Allí tampoco pasó desapercibida y se convirtió en musa del pintor mexicano, Waldo Saavedra. Según se publicó, su rostro y figura fueron retratados por él semidesnuda y su ilustración se convirtió en la portada de un disco de Maná.
“Era sencilla, cariñosa y muy sensible. Le fascinaba el tequila y el vino tinto”
Sara Cuéllar, una de sus excompañeras en México, describía así a la Letizia que conoció en aquella época, cuando la española tenía 23 años: “Era muy bailadora. Le encantaba la salsa. Íbamos al Salón de Veracruz, que no estaba de moda, con una imagen alejada de la típica niña guapa que va a los mejores sitios y se viste con lo último”, según declaró Sara a la revista ‘Quién’ en 2004.
Además señalaba que era una joven sencilla, que vestía con camiseta y jeans, le gustaba comer en un local que había cerca de la oficina, le encantaba leer, escuchar música en vivo y pedía “tequila o vino tinto, bebidas que le fascinaban”. Joaquín Sabina era su música de cabecera, también le encantaba U2 y Maná, a quienes llegó a conocer cuando les entrevistó.
También destacaba que era muy independiente, hiperactiva, defensora de sus ideas, cariñosa y muy sensible: “Un día lloró por unos perritos que se vendían en el mercado de Santa Tere. Le reclamó al vendedor: “¿Por qué tiene esos animales sin su madre? Pobres criaturas, si pudiera me los llevaba todos”.
Su admiración por Felipe González y su rechazo al matrimonio
Según Sara, Letizia tenía muy claro que triunfaría como periodista y tendría éxito: “Algún día voy a tener mi programa de televisión”. También tenía en mente viajar, vivir un año en Australia aunque América Latina le encantaba, sobre todo por el contraste de la riqueza y pobreza. “Se peleaba con el sistema”, señaló la excompañera de Letizia.
En esta época no escondía su admiración por Felipe González, le encantaba la comida de su tierra, el vino tinto y el queso manchego. Una vez que salió el tema de que el Rey emérito era mujeriego y que era un secreto e voces en España, Letizia explicó a sus amigos que existía un pacto entre la prensa y la familia real y ésta era intocable. Incluso en una ocasión Sara le habló de lo guapo que era el Príncipe, a lo que ella le respondió: “A mí también me parece guapo pero los hombres con cabello rizado no me gustan”.
Además recuerda que en México no le gustaba que le dijeran frases como “sí, señorita”, o que le abrieran la puerta del coche, incluso cuando un día un hombre le mandó flores, las rechazó y ella le envió flores junto a este mensaje: “Yo también puedo hacer eso”.
Los celos de su exmarido y los rumores de idilio con un hombre casado
Por aquel entonces descartaba la idea de casarse, el divorcio de sus padres le marcó. “No me quiero casar. Ya he vivido con Alonso [su exmarido] y seguramente voy a volver con él. Tengo muchos planes y un hombre siempre estorba en esas cosas. No me quiero comprometer”, recuerda que le comentó Letizia en esa época. Además Sara indica que en esa época la asturiana tenía muchos conflictos con Alonso, porque era un poco celoso.
En aquel entonces existía el rumor en la redacción de que Letizia estuvo con el subdirector del periódico ‘Público’ de Guadalajara, Luis Miguel González, casado en esa época. Aunque Sara no cree que tuvieran una relación, otros compañeros declararon a ‘Quién’ que entre ellos “hubo más que una simple amistad”. El caso es que después de que la mujer de González se enterara de la noticia, el matrimonio se divorció. Según relata la excompañera, cuando saltó la noticia de su compromiso con Felipe de Borbón, Luis Miguel envió un correo a todos sus amigos para que ninguno hablara de su relación con ella y lo negaran todo.
Mucho ha cambiado su carácter desde entonces. Ya no es tan natural como antes, incluso como demostró ser el día de su compromiso con el Príncipe con aquel “déjame terminar”. Desde hace años se le recrimina que no sea expresiva, espontánea y que muestre casi siempre un rictus serio. Sólo este año la vimos sonreír más que nunca junto a Juliana Awada, mujer de Mauricio Macri, presidente de Argentina.
Otras críticas que le han caído han sido por negarse a trabajar los fines de semana o por la sobreprotección que tiene hacia sus hijas, a las que apenas las vemos en su día a día, al igual que a ella, como en otras monarquías europeas. En el último año sólo hemos visto a Leonor y Sofía en seis ocasiones: en Marivent en verano, en el desfile de la fiesta nacional, en la apertura de la legislatura, esquiando en Candanchú con sus padres, en la misa de Resurrección de Palma y en la Primera Comunión de Sofía.
Su relación “autodestructiva” con Alonso que aún coleaba en 2002
El 7 de agosto de 1998 se casó por lo civil en Almendralejo con Alonso Guerrero, escritor extremeño y profesor de Literatura del Instituto Ramiro de Maeztu en el que ella estudió. Aunque llevaban juntos diez años, su matrimonio duró poco más de un año.
La última vez que Sara vio a su excompañera Letizia fue en 2002 en Madrid, antes de entrar en TVE. La periodista estaba muy ilusionada pero había adelgazado mucho por los nervios ante el nuevo cambio laboral, vivía con su madre pero estaba a punto de independizarse. Esa noche salió de nuevo el tema de Alonso, del que ya se había divorciado en 1999, y Letizia le contó que su relación estaba muy mal. “Su relación era muy apasionada en todo. Se admiraban mutuamente. Se seguían queriendo mucho. Era una relación destructiva pero con sus buenos momentos. Ella no sabía su volver con él o no porque también tenía un galán en puerta y no se quería comprometer con nadie”.
Tras regresar de México, Letizia hizo sus prácticas en medios como ‘La Nueva España’, ‘ABC’ y la Agencia EFE. Durante su paso por este último, hizo de actriz para un corto titulado ‘La mirada del ángel’, que se grabó en 1998 y del que no hubo rastro años después.
Ana Blanco sobre Letizia: “A esta chica la estáis pagando un máster”
Una vez licenciada trabajó en el canal Bloomberg, de economía y finanzas, y en 1999, se incorpora a la redacción de CNN + donde debuta como presentadora y mantendría una relación con uno de sus compañeros. Al poco tiempo se incorpora a TVE donde estuvo en Nueva York después del 11-S, en Irak tras el derrocamiento de Sadam o a pie de la marea negra del ‘Prestige’ que inundó la costa de chapapote. En esta última cobertura informativa coincidió con la visita oficial del Príncipe a Galicia. Después fue presentadora de Informe Semanal, del Telediario Matinal y del Telediario 2 junto al director de informativos de la cadena Alfredo Urdaci.
Algunos de sus compañeros de trabajo la definen como una persona muy inteligente y ambiciosa, mientras que otros la tachan de fría, calculadora e incluso trepa. Tanto e México como en España despertó celos y envidias entre sus compañeras. La presentadora Ana Blanco llegó a quejarse a Urdaci sobre ella y su ascenso meteórico con esta frase: “A esta chica la estáis pagando un máster”, sentenció la periodista según recogió Urdaci en su libro ‘Días de ruido y furia’.
Su último telediario fue un viernes 31 de octubre de 2003. Se despidió de los televidentes como siempre junto a Urdaci, sólo ellos dos y su entorno más cercano sabían que sería un último informativo. Un día después, la Casa Real anunció el compromiso del Príncipe de Asturias con la periodista.
Su noviazgo con el presentador de CNN+
Antes de conocerse su relación con Felipe de Borbón, Letizia mantuvo un noviazgo con el presentador, periodista y escritor David Tejera. En 2012 llegó a declarar tras nueve años en silencio: “No tengo ningún rencor porque me ha ido muy bien. Es un episodio pasado. Tampoco voy a intentar sacar partido contando mentiras ni contando cosas que sé. Si las contase dirían que soy un rencoroso y que no lo he superado y no es verdad”.
Además explicó: “Como le dije a un compañero de la profesión, la primera opción era hablar bien de ella aunque no lo hice. La segunda, decir la verdad y dejarla fatal y tampoco lo hice. Lo mejor que podía hacer era quedarme indiferente”.
32 días de luna de miel y el mayor palo de su vida
El 22 de mayo de 2004, los entonces Príncipes de Asturias se dan el ‘sí, quiero’ en un día lluvioso en la Catedral de la Almudena. Para su luna de miel hicieron un periplo por ciudades de España como Cuenca, Teruel, Zaragoza, Navarra y País Vasco. El resto nunca se confirmó, unos los situaron en Miami, otros en Tailandia, India, China y las Islas Fiji, donde se habrían alojado en un hotel de lujo cuya habitación por noche cuesta en torno a los dos mil euros. También habría hecho un crucero por el Mediterráneo. En total, 32 días de luna de miel, según ‘ABC’.
En el año 2007 vivió uno de los peores momentos de su vida, la muerte de su hermana Erika, a la que estaba muy unida y que dejaba huérfana a una niña. Una terrible pérdida para ella, que se encontraba embarazada de la Infanta Sofía, y para su familia. Letizia estaba rota de dolor como la pudimos ver en las imágenes del funeral, mostrando su lado más humano. Una pérdida que conmovió a todo el mundo.
Su cambio radical y de estilo
Nada tiene que ver su vestimenta de ahora con la de un principio. Su estilo era más informal, se decantaba por prendas más cómodas y menos glamurosas pero pronto vino su transformación hasta llegar a convertirse en un icono de la moda, destacar por su elegancia y convertirse en toda una ‘it girl’ fuera de nuestras fronteras.
En su transformación ha tenido mucho que ver Eva Fernández, la estilista que se incorporó en 2015 al equipo de la Zarzuela, y que la ha llevado a introducir en su armario a diseñadores como: Nina Ricci, Carolina Herrera o Juan Vidal, entre otros; así como a peinados que han sido muy comentados como la coleta bubble o el peinado efecto mojado. La Reina figura desde 2009 en la International Best Dressed List (Lista de las mejor vestidas a nivel internacional) de ‘Vanity Fair’ USA.
Su rostro también ha sufrido una gran transformación. No hay más que ver fotos del antes y el después para darnos cuenta de que se ha sometido a operaciones de cirugía estética. Los expertos señalan que se los retoques estéticos se han producido en nariz, pómulos, mentón y pecho, cuyo coste rondaría los 40.000 euros, y que se habría realizado en 2008 en la clínica Ruber, según publicaron varios medios. También se ha ayudado de otros truquitos como usar pestañas postizas y arreglarse la dentadura para tenerla perfectamente alineada y blanca. Mientras a algunos les fascina el cambio, otros sólo ven en ella a una especie de muñeca de cera sin expresión facial.
La nueva Letizia: abstemia y muy musculada
Su cuerpo también ha experimentado un gran cambio. A pesar de que siempre ha sido de constitución delgada, ha tenido etapas de extrema delgadez, -por lo que ha sido muy criticada tanto en España como fuera de aquí, y desde hace algunos años llama poderosamente la atención los músculos que ha desarrollado. La prensa británica le dedicaba una noticia a sus brazos y músculos tras su primera aparición después del verano.
Letizia sigue una estricta dieta y hace mucho deporte: corre y hace yoga. Además desde hace unos años se ha vuelto abstemia y no prueba el alcohol, sólo se moja los labios, o directamente no bebe aun cuando se hacen brindis, algo por lo que también ha sido muy criticada.
De clase media, a tener una fortuna de más de 8 millones de euros
A todos estos cambios, hay que sumarle que durante todos estos años su fortuna ha ido en aumento. El medio británico ‘Express’ ha publicado que su patrimonio asciende a los 8,3 millones de euros, mientras que el del Rey Felipe VI sería de 16,8 millones y medio de euros, el doble. Unos datos que pertenecer al año 2014, cuando todavía no había sido proclamado Rey.
El periódico inglés hace hincapié en que antes de casarse con Felipe, la periodista no gestionaba tanta riqueza y pertenecía a una familia de clase media. Además recuerda que en 2015, Felipe, tras ser coronado Rey, se redujo el salario en un 20% “para acercarse al público general”, mientras que la Reina pasó a cobrar más del doble, unos 128.000 euros.
El viernes 15, Letizia lo tiene libre
El día del cumpleaños, Letizia no tiene programado ningún acto oficial, se ha cogido libre o se lo han dado libre, pudiendo así preparar la fiesta de cumpleaños con total tranquilidad y disfrutar de su familia y de sus hijas. Los Reyes tienen actos programados el miércoles, donde acudirán los dos a la entrega de los Premios Nacionales de Cultura en Cuenca y el jueves, estarán por la mañana en Salamanca, en la apertura del curso universitario. Por la tarde, el Rey tiene una audiencia y el viernes, dos actos por la mañana, pero en solitario.
En el cumpleaños anterior de Letizia, los Reyes acudieron en acto oficial al estreno de la nueva temporada del Teatro Real, que se inauguró con 'Otello', de Guiseppe Verdi.
No te pierdas la galería de fotos de la transformación de Letizia.
