Viernes de Dolores, este es el primer Tuitopía desde que Elon Musk se enfadase con el anuncio de que Twitter iba a sacar un botón para editar los tweets y decidiese comprar la empresa. Elon ahora posee una empresa de coches eléctricos para salvar el planeta, una empresa de naves espaciales para huir del planeta y una red social para dividir a la gente y destruir el planeta. Está bien diversificado, como todo buen inversor.
Este jueves conocimos que Luis Medina, el hijo del Duque de Feria y Nati Abascal, cobró comisiones millonarias en la venta de productos sanitarios al Ayuntamiento de Madrid en los peores meses de la pandemia. Luis Medina es un noble, un tipo que tiene apellidos compuestos, viste de traje y corbata los jueves aunque no sea Semana Santa y normalmente es dueño de algún local nocturno en Marbella, con antorchas y Budas, donde se cobran las copas a 30€. A precio de Feria de Abril, donde los caseteros ya han anunciado que cancelan la Huelga General e inician la Juerga General, después de conocer que la jornada de 8 horas contra la que luchaban lleva vigente más de un siglo. Estaban diciendo que la Feria de Abril era incompatible con los derechos laborales decimonónicos.
En política, Zelenski ha pasado esta semana por el Congreso español por videoconferencia para pedir apoyo a Ucrania y ha aludido al bombardeo de Guernica, en su habitual guiño personalizado a cada país citando una tragedia nacional. A los holandeses les habló de la guerra de Flandes y a los franceses de la batalla de Verdún, aunque también podría haber mencionado la propia tragedia de ser franceses. Francia acude este domingo a las urnas con la novedad de que la candidata de extrema derecha, Marine Le Pen, las encuestas le dan un 24% de los votos y posibilidades en la segunda vuelta; y de que hay un candidato fuerte a la derecha de la extrema derecha, Eric Zemmour. Vamos, que se presenta a las elecciones en Francia el batallón Azov y saca un escaño. De todo esto se ha hablado esta semana en Twitter, la red social de Elon Musk.
Y además de Semana Santa, estamos en Ramadán, una tradición que en Corea del Norte celebramos doce meses al año y que a Benzema parece que no le afecta. La de Karim ha sido uno de los highlights deportivos de la semana con el extraño baile solidario de Pau Gasol.